Filosofía en español 
Filosofía en español

Televisión material y Televisión formal

[ 687 ]

Televisión y Ontología

A la televisión se le suele denominar el “Ente” o el “Ente público”. Un ente que, indiscutiblemente, ha de formar parte del campo del que se ocupa la Ontología especial. [72] Un ente que no se reduce a su condición de “tecnología de transmisión electromagnética de imágenes”, porque es un “sistema” constituido por un núcleo tecnológico y un cuerpo institucional (redes de postes repetidores, satélites, edificios, actores, guionistas, burócratas…) que se mantienen entre sí en constante interacción y que determina su desarrollo conjunto.

La televisión es ontológica, no solo porque se la conozca como “el ente”, sino porque está siempre envuelta por Ideas ontológicas tales como “Realidad”, “Verdad” o “Apariencia”. Pero estas Ideas no tienen por qué ser referidas únicamente a la tradición de la “Filosofía académica”, como si solo cobrasen significado en cuanto partes de sistemas filosóficos anteriores a la invención de la televisión (Gioberti, Felipe el Canciller, Berkeley, Platón…), porque son Ideas [783] que se “abren camino” también, y de modo originario, a través del propio “ente televisivo”. Esto no quita que estas Ideas hayan de ser confrontadas con otras Ideas de la tradición filosófica y, por tanto, con las fuentes técnicas, tecnológicas, etológicas o políticas de la que emanaron. La televisión una de las más sorprendentes invenciones tecnológicas de todos los siglos, es una fuente espontánea de la que han emanado determinaciones originarias de las Ideas de Apariencia y Verdad. La televisión es una fábrica de apariencias; y tras las apariencias que la televisión nos ofrece puede tener lugar la constitución de verdades, de acuerdo con la las Ideas de Apariencia y Verdad propias del materialismo filosófico. Más aún: Televisión (la televisión formal) [688] y Verdad son ontológicamente indisociables [697], a diferencia de lo que ocurre en el cine o en la televisión material. Esta tesis está propuesta en el terreno ontológico, es decir, en el terreno de la causalidad y no en el terreno axiológico.

No pretendemos afirmar que una “Filosofía de la Apariencia y de la Verdad” que tenga en cuenta la televisión permita alcanzar horizontes inauditos, enteramente nuevos. Pero sí afirmamos que las principales alternativas mantenidas por los sistemas clásicos en torno a las Ideas de Apariencia y Verdad reciben una reformulación nueva, tras su confrontación con las Ideas de Apariencia y Verdad determinadas a través del análisis de la televisión. Tampoco queremos fingir que comenzamos sin ningún presupuesto previo, como si las Ideas de Apariencia y Verdad fueran brotando del desarrollo del análisis interno del propio ente televisivo. Al contrario, es preciso subrayar que ya disponíamos de las Ideas de Apariencia y de Verdad [679-686] al aproximarnos al análisis de la televisión, para investigar el modo como en ella tiene lugar su diferenciación. [692-700]

{Tv:AyV 10, 12, 21, 24-27, 323 / EC55 /
EC74 / → TbyD}

<<< Diccionario filosófico >>>