Sobre Miguel Sánchez López en
Gil Blas, periódico político satírico
Gil Blas, periódico político satírico


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 31 de diciembre de 1864
año I, número 5
página 3

Eusebio Blasco

El año literario

Dispuesto estaba ya el año sesenta y cuatro a largarse con viento fresco del mujndo, cuando sintió que le tocaban suavemente en el hombro y que una voz delicada le decía:

—Palabra, amiguito.

Volvióse el aludido, y se encontró frente a frente del mismísimo dios Apolo, quien sin duda por acomodarse a la época literaria en que vivimos, venía vestido de polichinela, oliendo a francés a trescientas leguas.

—¿Qué se ofrece? dijo el año poniéndose las botas.
—Supongo que llevará V. el registro literario, como de costumbre. [...]
—¿Y estos folletos del padre Sánchez contra la vida de Jesús?
—¿El padre Sánchez va contra la vida de Jesús?
—Va contra el libro de Mr. Renan...
—Ah, no quiero eso. Prefiero la Letanía Lauretana, que es más divertida.
—Aquí tengo novelas, en gran número. [...]

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 7 de enero de 1865
año II, número 6
página 2

Eusebio Blasco

Año nuevo, vida nueva

[...] Si por un momento apartamos la vista de todo lo que tenga color político y la fijamos en otras cosas... ¡peor que peor!

Asomen Vds. la cabeza por cualquier teatro. Aquí se ejecuta una comedia que parece un artículo del Padre Sánchez. Allá se grita un mal arreglo de una mala obra francesa. Acullá se recurre a la magia o a la zarzuela de relumbrón, para que el público inteligente pase tres o cuatro horas en el teatro, que más le valía pasarlas a caballo en la estatua de la Plaza Mayor. En una palabra, puédese establecer esta proposición matemática. La dominación moderada es al arte dramático, como D. Ramón María Narvaez es a D. Manuel Catalina. [...]

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 7 de enero de 1865
año II, número 6
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Entre los ochenta errores que condena el Papa, está la libertad de imprenta. Los periódicos católicos, únicos que toman al pie de la letra la encíclica, siguen usando de la libertad de imprenta.

Padre Sánchez, padre Sánchez,
la consecuencia es bien clara;
con que arroje usted la pluma
o quítese la sotana.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 21 de enero de 1865
año II, número 8
página 3

el Padre Sánchez despide a los redactores de la Regeneración / Francisco Ortego Vereda 1833-1881

La encíclica condena la libertad de imprenta.

El padre Sánchez, director de La Regeneración, es un buen católico, que odia todo lo que el Papa condena.

Así es que despide a los redactores y suspende la publicación del periódico.

——
Una monja [ sor Patrocionio ] que trata de hacer la felicidad de España llenándola de conventos / Francisco Ortego Vereda 1833-1881
Una monja que trata de hacer la felicidad de España llenándola de conventos

–Hermana ¿llevais ya muchos?
–No padre; sólo he puesto uno en Aranjuez, otro en el Escorial, otro en la Granja.
–Pues sigamos nuestra tarea, y todo sea por amor de Dios.
–Amen.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 28 de enero de 1865
año II, número 9
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Al padre Sánchez, director de La Regeneración, no ha hecho reir la caricatura del número anterior.

Y vean Vds. lo extraordinario:

Aquella caricatura fue hecha para hacer reir a todo el mundo... menos al padre Sánchez, director de La Regeneración.

* * *

Más todavía

El padre Sánchez se compadece de la prensa cuando la ve colocada en cierto terreno (que debe ser el de la caricatura).

Porque el padre tiene una debilidad, bien disculpable en un sacerdote que hace uso de la libertad que condena el Papa, y esta debilidad consiste en creer que su prosa y sus latines valen más que una caricatura de Ortego.

¡Si estará obcecado!

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 25 de febrero de 1865
año II, número 13
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

El padre Sánchez, director de La Regeneración, es un gran revolucionario.

Hablando del donativo de la reina, dice:

—«No he tomado hasta hoy la pluma para encomiar a Doña Isabel II. No la juzgaba digna de acción tan heroica.»

Francamente, Padre Sánchez: ¿qué idea se había Vd. formado de la reina de España?

* * *

Pero el Padre Sánchez, dos días después dice que lo dicho es una errata.

Eso cree Gil Blas de todo lo que escribe el Padre Sánchez.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 4 de marzo de 1865
año II, número 14
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Los neos de Sevilla han celebrado un auto de fe con 832 libros.

Todos fueron devorados.

Si entre ellos hubieran metido a Gil Blas, hubieran quemado también al P. Sánchez, –en caricatura.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 1º de julio de 1865
año II, número 31
página 1

Luis Rivera

Protestas neo-católicas

Sr. director de La Regeneración
Murcia 24 de junio

¡Estamos frescos! Dicen que se va a reconocer el reino de Italia. ¡Anda, salero!

Yo he aprontado cuatro reales vellón para la letanía lauretana, me he criado en una sacristía con las escurrejas de las vinagreras, y tengo por lo tanto el derecho de hablar muy gordo.

Protesto con toda la fuerza de mi sotana contra una medida tan salvaje.

La noticia me tiene tan aturdido, que ayer al bautizar a un chico le puse la sal en los ojos en vez de ponérsela en la boca. Figúrese Vd. como chillaría el angelito.

Cuando me tropiezo en la calle con algún liberal, exclamo por lo bajo.

—¡Maldita sea tu estampa! Así te diera una pulmonía que te llevara a los infiernos. Amén.

Mi aflicción es tan profunda, que acabo de guardarme en un rapto de desesperación toda la cera de la sacristía.

¡Vamos, no sé lo que me hago!

Padre Sánchez, Vd. que es un buen sacerdote, siga diciendo en su periódico esas cosas de la cartilla y de Donna mobile que son la alfalfa de los neo-católicos.

Soy de Vd. con la mayor humildad su hermano en sotana.

José Lipende

* * *

Sr. director de La Regeneración
Avila 25 de junio

¿Qué es esto? ¿Con que después de haber quemado tanto libro y de negar la sepultura a los liberales, salimos ahora con el reconocimiento de Italia?

Amigo padre Sánchez, nos van a dar una bofetada de cuello vuelto, que me río yo.

Un ejemplar de La Llave de oro que llevo debajo de la sotana, está sudando la gota gorda.

Yo protesto contra los planes del gobierno, y voy a recoger firmas para remitírselas a Vd. a vuelta de correo.

Para engañar a los tontos, diré que esto es cosa del papa y de la religión.

Ya verá Vd. el cisco que se arma en este pueblo.

Hasta la vista.

El padre Ciruelo

* * *

Sr. director de La Regeneración
Madrid 28 de junio

Quisiera hacer una protesta que ardiera en un candil.

Ayer hablé con la monja sobre el reconocimiento de Italia y me dijo:

¡Quiá!

En este quiá fundo mi esperanza.

Entre ella y el señorito harán que caiga este ministerio, que se atreve a lo que hay de más sagrado y respetable para un neo.

Yo supongo que Vd. hará porque el señorito entregue en buenas manos nuestras quejas.

Ayudemos al señorito, y si también nos da mico, entonces nos arremangaremos del todo la sotana.

Mientras la monja y el señorito estén a la mira, no perdamos del todo la esperanza, padre Sánchez.

En las situaciones extremas debe sacarse el Cristo, digo, las cartas.

Con este motivo me ofrezco de Vd. hasta cierto punto.

El padre Solapa

* * *

Sr. director de La Regeneración
Burgos 26 de junio

Protesto contra lo de Italia.
Protesto contra O'Donnell.
Protesto contra la cátedra de Castelar.
Protesto contra Obregón.
Protesto contra la Donna mobile, como Vd. dice en La Regeneración.
Protesto contra todo bicho viviente.
Voy a coger el trabuco y el rosario.
Denquia luego.

Un ex-claustrado

* * *

Sr. director de La Regeneración
Loja 26 de junio

Cuando yo le disia a osté que en cayendo D. Ramón no había na e lo dicho, zabia lo que me pescaba.

Miste, pae Sanchez, ayer cuando leia La Regeneración en arta vos, fue tanta la grasia que le jiso a un monagro, que se jechó er bonete a la oreja, y se puso a bailá la soleá.

¡Y cómo se meneaba er muy hijo de su mare!

Y a la fin cogio er guitarro, y con voz mas durse que la de un perro e ganao, entonó la siguiente copliya:

En un coche de arquilé
ha pasao por aquí;
yevaba una carta fuera,
por eso la conosí.

Ziga osté con las protestas, y yo mo fresco a remitirle una resma e papez firmao por toos los neos de tres leguas a la reonda.

Toos me preguntan:

—¿Pa qué quié ozté que firme yo ezo, pae mio?
—Anda, hijo e tu mare, firma eze papez, y aluego verás cómo te doy primisio pa seguí en tus jazañas.

Y toos firman como en barbecho.

Zoy de osté, &c.

El pae Manzaniya.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 8 de julio de 1865
año II, número 32
página 2

Eusebio Blasco

Revista de Madrid

Otra de las novedades de Madrid es Pietrópolis, el del Circo nuevo. Pietrópolis es, ni más ni menos, un escritor ministerial. Un hombre que se acomoda a todo. Cuando quiere sacar partido de su talento, pone por delante el estómago. Se dobla como una esquina y se pega como un cachete.

Aquel hombre no tiene hueso sano. Es muy posible que una noche se meta él mismo en uno de sus bolsillos, y después se olvide de sacar las manos para llamar a la puerta de su casa. Come y bebe con los piés; es la antítesis del género humano.

No le falta más que escribir con los piés; pero sin duda Pietrópolis conoce la tierra que pisa y sabe que eso aquí no sería nuevo. O tal vez tema que el P. Sánchez le de una plaza en La Regeneración. ¡Quién sabe!

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 8 de julio de 1865
año II, número 32
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Los periódicos neo-católicos tienen la gracia de Dios. Quiero decir, muchísimo salero. Para ello han necesitado acudir a sus relacionados y amigos graciosos, y decirles: ¿Me hacen Vds. el favor de un chiste?

——

Yo soñé anteayer que el P. Sánchez se paseaba por la calle de Gitanos. Y que después escribía en La Regeneración sus impresiones.

——

Sin saber por qué me estoy acordando de aquel cura del Diablo mundo. ¡Olé! Con la voz de Obregón y el salero del P. Sánchez, haría yo lo que quisiera de cualquier real moza.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 15 de julio de 1865
año II, número 33
página 2

Eusebio Blasco

Exposición que dirige un maestro de primeras letras,
a la mamá de un discípulo suyo

[...] Y no ha de ser, no señora, o primero ha de fumar en pipa el padre Sánchez. [...]

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 15 de julio de 1865
año II, número 33
página 2

Manuel del Palacio

Los nuevos cruzados

Clarines se oyen de guerra
en el campamento Neo,
que empiezan cerca de Mula
y acaban en Navalcarnero. [...]
Todo es bulla y algazara,
todo es entusiasmo y miedo,
Sánchez arenga en gitano,
Catalina habla en hebreo,
Nocedal pide ceniza,
el Padre Casares, fuego;
la cantinera, soldados;
y muchos curas, dinero. [...]

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 29 de julio de 1865
año II, número 35
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Los periódicos nos han regaladao como preciosa la siguiente poesía, que dicen es traducción de Enrique Haine:

Allá arriba, el sol brillante;
las estrellas allá arriba;
aquí abajo los reflejos
de lo que tan lejos brilla.

Allí lo que nunca acaba,
aquí lo que al fin termina;
y el hombre atado aquí abajo
mirando siempre allá arriba.

Podrá ser de Enrique Haine, pero para mí como si fuera de Enrique Lazeu. El mismo efecto me hace eso que si dijera:

Allá arriba aquella monja,
aquella monja allá arriba,
y aquí abajo el Padre Sánchez
chupando una tagarnina.

Allí el señor Aparisi,
aquí la fiebre amarilla,
y en medio Ferrer del Río
rascándose la barriga.

* * *

En adelante los neos van a rezar la letanía de este modo:

Maldito sea el progreso
de la civilización.
Kirie eleison.

Maldito sea el gobierno
titulado de la unión.
Kirie eleison.

Nosotros somos amigos
de la casa de Borbón.
Kirie eleison.

Y nos vamos a meter
en la gran conspiración.
Kirie eleison.

Nocedal y el padre Sánchez
nos darán su aprobación.
Kirie eleison.

Guisaremos un platito
de patatas con jamón.
Kirie eleison.

Y después de bien comidos
echaremos un sermón.
Kirie eleison.

Y en seguida, digo yo ahora, les daremos a Vds. la gran desazón!

Esto no es verso, pero es verdad.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 5 de agosto de 1865
año II, número 36
página 2

Eusebio Blasco

El grito

III
En el silencio de la noche

¡Esto se va!
Aparisi y Guijarro.

—¡Guau! ¡guau! ¡guau! ¡guau!
—¡Hola! ¡Ahí viene el P. Sánchez!
—¡Señores... alerta! ¿Ha llegado el momento?
—Sí, señor; ¿viene Vd. armado?
—Aquí traigo las tijeras.
—¡Adelante!
[...]

.

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 19 de agosto de 1865
año II, número 38
página 2

Eusebio Blasco

Magnetismo animal

[...]
—¿Dónde está el cólera?
—En el ministerio.
—¿Me podrás decir cómo piensan los neos?
—Necesito una prenda de ellos para ponerme en comunicación...
—¿Te acomoda el padre Sánchez? Haré que te le traigan.
—¡Jamás!
—Aquí tienes un número de La Esperanza.
—¡Venga, venga!
Y Saturnina estableció la corriente magnética colocando el periódico en cierta parte. [...]

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 23 de setiembre de 1865
año II, número 43
página 1

Eusebio Blasco

Media corrida de becerros

En la plaza pública, a las cinco y media de la tarde en un reló vicalvarista, y ante una concurrencia tan numerosa como imponente, se presentó la cuadrilla, compuesta de los conocidos aficionados Claret y Tenorio, y el sobresaliente Paco, alias Campanilla, como primeros espadas. Sánchez (el padre) y Cosme, de Tarazona, Puente, alias Cardenal, Banaparte, Tejado, Villoslada, Catalina (D. Severo), Selgas y otros varios.

Presidía la plaza la simpática señorita Doña Patrocinio de los Milagros. [...]

El segundo, Posada, recibió más de treinta puyazos de otros tantos aficionados (periodistas todos ellos) y huyó el bulto pegándose al olivo. Ibrahim y Espadón le pusieron dos docenas de palitos, y lo remató el Padre Sánchez de una algo baja arrancando. [...]

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 30 de setiembre de 1865
año II, número 44
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Sospecha La Regeneración que nos amenaza el suplicio de Sodoma.

¿Y también al Padre Sánchez? ¡Caracoles!

 


Gil Blas. Periódico político satírico
Madrid, sábado 11 de noviembre de 1865
año II, número 50
página 3

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

La Verdad hace una mueca, y dice con cierta sonrisita burlona, que el partido democrático tiene al cura Medina, el progresista al cura Aguayo y el absolutista al cura Sánchez.

De modo que la unión liberal es el único partido que no tiene cura.

Hace tiempo que lo sabíamos.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 25 de noviembre de 1865
año II, número 52
página 4

Eusebio Blasco

Párrafos

—Dígame Vd., ¿es verdad que Enrique Escrich publica una novela titulada La esposa mártir?
—Sí señor, yo tengo la primera entrega.
—¿Y por qué se llama así la novela? Tengo yo curiosidad de saber... La esposa mártir... no adivino.
—¡Ah! es muy sencillo. Un marido hace leer a su mujer todos los días dos veces los artículos del Padre Sánchez.
—¡Comprendo el título!

* * *

[...]
—Me podría Vd. decir quién era el amigo con quien estuvo Vd. hablando?
—El padre Sánchez.
—En ese caso deben prenderle a Vd. Es un crimen hablar con las paredes.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 9 de diciembre de 1865
año II, número 54
página 1

Gil Blas

Cosas del día

Empieza a susurrarse algo de lo que el gobierno piensa hacer con los obispos que han faltado a la ley.

Nosotros empezamos por creer incapaz a este gobierno de ninguna resolución enérgica contra los obispos.

¡En buen país estamos!

Aquí hay una aristocracia, una sola, pero fuerte, inmensa, altísima, encastillada en sus privilegios, que se rie de las leyes, de las ciencias y de todo lo que no se postra humilde a sus plantas.

Esta aristocracia la forman los obispos.

No ataqueis el más insignificante de sus derechos, porque la voz pavorosa del templo estremece a los fieles, y todos caen de rodillas exclamando: ¡Perdón, soy un bruto, santo, santo!

No intenteis coartar el derecho que tienen a la pesca del río, porque Dios mueve las aguas, y cielo y tierra se juntan para castigar a los sacrílegos.

Y la cosa no trae malicia.

Se trata nada menos que de desterrar a los obispos que han faltado a la ley.

Pero no hay que asustarse.

Las leyes que con tanto rigor se aplican a los editores y periodistas, no tienen fuerza contra los obispos.

Y si no preguntádselo al padre Sánchez.

Los españoles pueden echarse a dormir tranquilos mientras los serenos cantan de noche:

–¡La una, nublado y obispooooo!

 


Gil Blas
Madrid, sábado 9 de diciembre de 1865
año II, número 54
página 3

Eusebio Blasco

Galería de espectros

[...] ¡Este es el gran Congreso de los diputados! ¡Y para esto vamos a poner dos leones de bronce en la puerta!

Le digo a Vd. que esto se pone malo, Doña Baltasara.

Tarde, y parir hija.

Yo doy la enhorabuena al país por los diputadillos que le han salido.

No faltan en la lista más que el Padre Sánchez, el Regatero y Manguela.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 9 de diciembre de 1865
año II, número 54
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

El Sr. López de Ayala ha sido nombrado director del Conservatorio, sin sueldo.

Encuentro esto mucho más natural que haber nombrado, como se decía, al cura Eslaba; pues un señor con manteos, dirigiendo las cátedras de música profana y de declamación, me hace el mismo efecto que si se nombrase al Padre Sánchez cabo de comparsas del teatro de la Zarzuela.

Para uno y otro cargo es indispensable arremangarse la sotana.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 23 de diciembre de 1865
año II, número 56
página 4

Eusebio Blasco

¡Cáspita!

Tiemblo al mirar los periódicos
y al comprender las mil cábalas
que en sus planes terroríficos
anuncian con fe satánica.

Yo no he visto una estadística
de crímenes y de máculas
más completa y más horribile
que la de esa gente cálida.

Señores, vaya unos cálculos
los de la turba monárquica;
el que menos tiene in pectore
ideas anti-dinásticas.

Dicen los neo-católicos
que O'Donnell es un gran sátrapa,
y en esto apruebo el epíteto,
aunque se ofendan las Cámaras.

Dicen que el mundo católico
tiene una afección asmática,
y que hay próximas catástrofes,
y que andan sueltas las ánimas.

Por Madrid vuelan murciélagos
de conducta problemática,
venidos de Trajanópolis
y de otros puntos del Africa.
¡Me escamo de los Vildósolas
y demás aves acuáticas!

Tejado recibe epístolas
de regiones lusitánicas:
¡ay Dios, valiente cariátide
para jefe de una kábila!

El Padre Sánchez, al sótano
baja a estudiar ciencia plástica,
y es un demonio el presbítero
cuando se propone dárnosla.

Los progresistas dinásticos
se han comprado ciertas máquinas
para tirar y hacer públicas
cien ediciones del trágala.

Cierta señora muy nóbile,
que huyó de la corte hispánica
cuando aquí nos destrozábamos
por la causa democrática,
cartas firma desde Bélgica,
y de una manera cándida
la fe de Olózaga inédita
quiere trocar en inválida.

Este país es un páramo
donde hay demasiada cháchara,
y todo se echa en artículos
y en estudiada sal ática.

La tempestad está próxima,
no hay quien sepa conjurárnosla,
y hay quien está hecho un galápago
arropadito entre sábanas.

¡Sús! despertad, energúmenos,
armemos una... vandálica,
ya que se dé el gran escándalo,
no quede ni un chupa-lámparas.

* * *

Para una comida de Pascua

Pavo relleno

A tres artículos
del Padre Sánchez
le echas encima
sal y vinagre.

Coje un pimiento,
luego un tomate,
y lo revuelves
con pastorales.

De un unionista
tomas la sangre,
le echas canela
y ponla al aire.

Luego a Tenorio
pillas dos frases,
y de Pinedo
tres chistes graves.

Dentro del pavo
pon este enjuague,
toma a las doce
un piscolávis,
y al cuarto de hora
serás cadáver.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 30 de diciembre de 1865
año II, número 57
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

Ya saben Vds. que en los últimos días del año suelen echarse los estrechos.

Pero no saben Vds. que ayer se echaron en casa del general O'Donnell.

Y los amigos y amigas de la casa salieron en esta conformidad:

La Revolución, con el Padre Sánchez
Don Leopoldo, con la baja de los fondos.
GIL BLAS, con La Dinastía
El rey de Portugal, con La Iberia
Garibaldi, con Pío IX.
El sentido común, con Navarro Villoslada.
La Unión, con el tío Matías el fosforero.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 13 de enero de 1866
año III, número 59
página 1

Eusebio Blasco

Un día de prueba

I

Pues señor, tengo yo un amigo... ¡pobre muchacho! no he visto un hombre más fatal desde que le conozco.

Nació en viernes al anochecer, es decir, ni de noche ni de día: su madre se murió al parirle; el comadrón le ató mal el ombligo, y lo fastidió; tardó siete días en ser bautizado porque en la iglesia no encontraban agua, y al bautizarle le dieron un porrazo contra la pila, que a poco más me lo despampanan.

Nació en un día último de año. En fin, y con perdón de ustedes, se llama Silvestre.

De este Silvestre, pues, quiero hablar hoy, que no me acomoda ocuparme de asuntos políticos, y el lector me lo habrá de perdonar en gracia de las circunstancias.

Si yo fuera a contar las desazones que Silvestre ha pasado en veinticinco años que hace que cayó en el mundo como una maldición, no tenía bastante ni con todo el papel que ha desperdiciado el P. Sánchez en su vida. ¡Qué digo! ni con todo el papel del Estado había suficiente! [...]

 


Gil Blas
Madrid, sábado 13 de enero de 1866
año III, número 59
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

El padre Sánchez va a publicar un nuevo periódico.

–¡Ah, valiente!

 


Gil Blas
Madrid, sábado 20 de enero de 1866
año III, número 60
página 4

Eusebio Blasco

Cabos sueltos

El trueno gordo

¡No podía faltar!

En La Regeneración ha estallado la bomba.

El P. Sánchez se ha separado de este periódico, y va a fundar otro titulado La Lealtad.

Su grito es este:

Suscritores, el que sea leal, que pague.

Los suscritores dirán:

Escamati.

——

Antes de dejar La Regeneración el P. Sánchez, ha pedido a los obispos la lista de todos los neos disponibles.

¡Alza, morena!

En esta obra piadosa funda el P. Sánchez sus esperanzas.

El buen padre trabaja para la viña del Señor.

——

El P. Sánchez quiso comprar La Regeneración, y creo que se arriesgaba a dar dos pesetas por ella.

Pero su propietario el Sr. Peral de las Cuevas, creyendo que La Regeneración puede valer algunas desazones más, se llamó andana.

Amenazó el cura.

Resistió el seglar.

Y ¡cataplum! vino el diluvio.

Llorad, neos, llorad sin ventura de La Regeneración.

¡La Regeneración sin P. Sánchez... es decir, un vaso de veneno sin veneno!

——

Aún hay más.

El P. Sánchez ha dirigido una carta a los suscritores de La Regeneración en que les dice: ¡vénganse Vds. conmigo si son hombres!

Lo sabe el Sr. Peral de las Cuevas y les dirige otra en que dice: no se fien Vds. del padre cura.

Y aquí da fin el sainete;
silbemos sus muchas faltas.

* * *

Cantares

Quien tenga penas, que llore;
quien tenga placer, que ría;
yo que vivo muy contento
tomo el sol todos los días.

Dame de tu boca un sí
que me sabrá a caramelo;
y sino dame mil duros
y guárdate el sí, salero.

En tí pienso por la noche,
en tí pienso por el día;
de tanto pensar en ti
así estoy yo, –sin camisa.

Escribo, y no de política,
me confiesa el padre Sánchez,
y hago el amor a una vieja...
¡mira tú si estaré en grande!

El que nace pobre y feo,
y se casa y es fecundo,
y me lo dejan cesante,
¿para qué vino a este mundo?

 


Gil Blas
Madrid, sábado 27 de enero de 1866
año III, número 61
página 4

Cabos sueltos

A la carta circular del propietario de La Regeneración, Sr. Peral de Cuevas, acaba de replicar el padre Sánchez, –y de lo lindo.

En una hoja suelta dirigida a los suscritores de aquel periódico, empieza el P. Sánchez por sentar que, si bien pudiera llevar a los tribunales de justicia al Sr. Peral de Cuevas, ofrece no hacerlo y tolerar cuanto de él se diga, porque la calumnia, aunque sea venenosa, sólo sirve para labrar corona a la inocencia.

Por fin, el P. Sánchez dice algo que está conforme con GIL BLAS.

——

Una observación: el P. Sánchez cree que en vez de ir a los tribunales, se defiende mejor contestando a los cargos del Sr. Peral, y dando a éste libertad completa para que formule sus acusaciones.

¿No podría el P. Sánchez hacer extensivo este sistema a todas las demás cuestiones, ya políticas, ya religiosas?

——

Entre las muchas gracias de La Regeneración, que servirán para edificar en el camino de la virtud y la constancia a los buenos suscritores a este periódico, se encuentran las siguientes:

1º El propietario de La Regeneración se acercaba a un personaje de la situación (ministerio Narvaez) y de palabra y por escrito le pedía dineros y los recibía.

Esto es muy neo-católico.

Al ver cómo La Regeneración combatía después al ministerio O'Donnell y a todo bicho viviente, es de suponer que no tenía ningún personaje de la situación que le diera dineros.

2º Que se daba bombo a la persecución que sufría el periódico con objeto de sacar el trigo a los suscritores.

Esto siempre, según dice el P. Sánchez, sin su aprobación.

3º Que una casa-banca de Madrid dio a La Regeneración por espacio de quince meses, a razón de 4.000 reales mensuales, la cantidad de 60.000 rs. por unos artículos que en defensa de no sabemos qué, escribía el P. Sánchez.

Y esto lo dice el P. Sánchez con el dolor consiguiente a quien no vio un real de esos 60.000 que se embolsó católicamente el Sr. Peral de Cuevas.

Pero llegó un día en que el P. Sánchez dijo: «Me planto,» y no escribió más artículos, y el propietario dejó de recibir el momio de los 4.000 rs. mensuales.

¡Oh ingratitud! ¡Oh intención de cura, y de cura Sánchez, que no tiene cura!

En cambio de esto, el P. Sánchez hizo su viaje a Malinas, viaje muy católico, y La Regeneración no le abonó ni un cuarto sobre los gastos.

Ya iría yo otra vez a Malinas, P. Sánchez, ni a Melilla tampoco, para dar con esos ingratos que se embolsan las subvenciones y le dejan a uno colgado con los gastos del viaje.

——

Falta el rabo por desollar.

La Regeneración ha sido muy valiente para combatir los ilustres infortunios.

Pero lo que ignorábamos es que el propietario de la idem, no viniese a Madrid durante el cólera, lo cual dio motivo a que le quitasen su destino, que disfrutaba merced a la tolerancia del gobierno al que combatía tan encarnizadamente.

Una vez que el propietario se vio cesante, quiso hacer ver a los buenos suscritores de La Regeneración, que este contratiempo lo debía por defender las doctrinas del periódico.

Y dice el P. Sánchez: ¡Quiá! ¡Si Vd. no escribe!

——

Después de pensar un rato en estas gracias de La Regeneración, coja Vd. al P. Sánchez y al Sr. Peral de Cuevas, átelos fuertemente, arrójelos en seguida a un campo de víboras, y a la mañana siguiente todos serán cadáveres...

(Excepto el P. Sánchez y el Sr. Peral de Cuevas.)

 


Gil Blas
Madrid, sábado 10 de febrero de 1866
año III, número 63
página 4

Cabos sueltos

La Regeneración, que antes salía por la noche, ha empezado a salir por la mañana.

Hay quien opina que esta variación se debe a las ordenanzas de policía urbana, que prohiben salir de noche a ciertas mujeres.

* * *

Se queja el P. Sánchez en La Lealtad, de que el autor de la Revista que se representa en el Circo ponga a los neos como un guiñapo.

Cuando El Espíritu Público trataba de miserables a los periodistas, no se le ocurrió al P. Sánchez la más leve protesta.

Sin duda el P. Sánchez cree que puede dejarse insultar como periodista, siempre que lo respeten como neo.

Él se entenderá.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 14 de abril de 1866
año III, número 72
página 4

Cabos sueltos

El P. Sánchez anda a sopapos con el antiguo propietario de La Regeneración, Sr. Peral de Cuevas.

¿Por cuestión de dogma? No: por cuestión de cuartos.

El cura (que es andaluz). —¡Ea, ya me remangué el manteo! ¡Vengan monagos!

El Sr. Peral. —¡Aquí de Dios, que se me han perdido cuatrocientos tomos de un Sermonario pistonado!

El cura. —¿A que le envío a Vd. a presidio?

El Sr. Peral. —¿A que le saco a Vd. las tripas?

El cardenal Antonelli (poniéndose por medio). —¡Ah, fratelli, no siate bruti! Pace, per Dio, e no escamati a i catolici qui aflojanno peseti!

 


Gil Blas
Madrid, sábado 5 de mayo de 1866
año III, número 75
página 2

M. del Palacio

El 5 de Mayo
o los dos años y un día

(Imitación de Manzoni.)

¡Hoy fue! bajo las sábanas
que el suelo defendían,
de los destellos vívidos
de un sol que no querían,
hoy fue cuando los réprobos
juntáronse a comer.
Los campos de su júbilo
conservan la memoria;
sus juramentos bélicos,
sus cánticos de gloria,
sus alusiones pérfidas
aun tienen forma y ser.

Aun duran los obstáculos
que allí se combatieron,
aun mandan los políticos
que fe y virtud mintieron,
y del abismo al vértice
llevaron al país.
Aun de la gente mística
domina la influencia,
y se habla de don Cándido,
y el duque de Valencia,
y Sánchez el presbítero,
y el conde de San Luis.

[...]

 


Gil Blas
Madrid, sábado 5 de mayo de 1866
año III, número 75
página 4

J. Alvarez Guerra

Las últimas armonías

[...] Momento de conmoción en la sala. Un criado anuncia, se acaba de recibir una carta, y la Sociedad pide que se lea.

–Ojo a la carta, prorrumpe el presidente. Dice así:

«Morella 4, mayo del año de O'Donnell de 1866. –La longaniza sea con vosotros, y también conmigo (P. Sánchez, capítulo I. Ad Colacionen Clericarum.) Amados míos, tengo un flato que me tiene partío por los riñones: esta sinrazón, es la razón que me impide marchar a esa; mas mi soberbia pluma de ganso (la que ofrezco) es la encargada de participaros me mistifico a lo que acordeis. –Virgo Clementíssima. –Siete ochavos morunos. –El presbítero Pelucho.»

Al pie de la firma hay un sello que representa un timbal de macarrones.

–Presbíteros, aprendices de cura, cantaores por lo fino, sacristanes y monagos, continúa el presidente, ya lo habeis oido. La Europa es nuestra.

Al tender una mirada por cima de vuestras cabezas, me creo con más pelo que Posada Herrera.

La presente legislativa queda cerrada; viene el calor; La Armonía concluye, y cada uno de vosotros se marchará por esos trigos de Dios...

Os recomiendo no hagais ninguna barbaridad.

El salón quedó frío; la filosofía alemana sudando cerveza, y las sombras sustituyeron a las sombras.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 5 de mayo de 1866
año III, número 75
página 4

Cabos sueltos

El P. Sánchez ha comenzado ya a publicar en La Lealtad la serie de artículos con que pretende hundir el nuevo libro de Renan, Los Apóstoles.

En el género de padres se conocen ya las tres variaciones: –lo sublime, lo vulgar, y lo absurdo; o lo que es lo mismo: el Padre nuestro, el padre Petavio, y el padre Sánchez.

 


Gil Blas
Madrid, sábado 12 de mayo de 1866
año III, número 76
página 4

Cabos sueltos

Poquita gracia que me ha hecho a mi la pastoral del obispo de Cádiz, prohibiendo la lectura de El Demócrata Andaluz. He aquí un periódico que empieza con suerte.

La pastoral tiene unos cuarenta párrafos, y el borrego de Cristo que se los tire a pecho de un golpe, ¡se queda harto de prosa hasta la Semana Santa!

¡Qué párrafos, santo Dios! ¡Y cómo pone la pluma su eminencia ilustrísima!

Me río yo del P. Sánchez, que ha empleado ya más prosa en combatir Los Apóstoles que Renan en escribirlos, y esto sin entrar todavía en materia. [...]

 


Gil Blas
Madrid, sábado 26 de mayo de 1866
año III, número 78
página 4

Cabos sueltos

El P. Sánchez pide con mucha necesidad en su periódico religioso, y en una sección preferente del mismo, que Mr. Bagier contrate a la Sra. Galleti para el teatro Real de Madrid en la próxima temporada.

El P. Sánchez hace tan entusiastas elogios de esa tiple, que no parece sino que, al escribirlos, se le caía la baba de puro gusto.

Efectivamente, la señora Galleti se ha distinguido en la escena del teatro Real por sus notables cualidades de artista, y por el escote de sus vestidos.

¿La habrá visto el P. Sánchez entre bastidores?

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, domingo 23 de diciembre de 1866
año III, número 24
página 4

Cabos sueltos

Un pavo relleno

Tomarás un pavo
(¡ojalá pudiera!)
le abrirás de modo
que dentro le quepan
de Quien siembra vientos
dos o tres escenas
que te harán las veces
de pimienta negra;
el cancan que bailan
juntas las estrellas
será el picadillo
y ¡ojo! que es de setas;
unas variedades
del gran Vinajeras
lo pondrán de modo
que nadie lo huela;
en vez de piñones,
los piños que enseñan
la Gómez y Mario
cuando representan;
llénale la tripa
de Carnes-tolendas,
y si a esto le añades
La Correspondencia,
Estrada, Rentero
y el bardo del Sella,
con que el padre Sánchez
le de cuatro vueltas
y luego Costanzo
lo sirva a la mesa,
de diez convidados
catorce revientan.

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, jueves 6 de junio de 1867
año IV, número 71
página 4

Cabos sueltos

No sólo el Sr. Carulla irá a Roma: también el Padre Sánchez piensa echar su cuarto a espadas y escribir desde allá un diluvio de artículos.

Recomendaríamos el paraguas a los suscritores de La Lealtad, si no supiéramos que están blindados.

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, jueves 27 de junio de 1867
año IV, número 77
página 4

Cabos sueltos

Ya salió para Roma el P. Sánchez, director de La Lealtad.

Cuando se entere de que en Roma hay judíos, mucho tememos, si se deja llevar de su genio, que arme un zafarrancho.

¡Dios lo permita!

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, jueves 4 de julio de 1867
año IV, número 79
página 4

Cabos sueltos

El padre Sánchez empieza ya a publicar en La Lealtad las impresiones de su viaje a Roma.

Apenas llegó a Marsella, dice que lo llevaron a la aduana.

Afortunadamente no lo decomisaron.

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, domingo 14 de julio de 1867
año IV, número 82
página 4

Cabos sueltos

En las cartas del P. Sánchez se da cuenta de varios casos de cólera fulminante ocurridos en Roma.

También dice el P. Sánchez que ha visto al ex-rey de Nápoles, y que si creyera en la frenología, sentiría haberle visto.

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, sábado 27 de julio de 1867
año IV, número 86
página 1

Luis Rivera

Lo que corre por ahí

Estando el cólera en Italia, puede decirse que lo tenemos a la puerta, y la noticia no es para echarla en saco roto.

Según el P. Sánchez y otros padres menos célebres, en Roma está haciendo bastantes estragos.

En virtud de esta noticia, supongo no habrá en Madrid un solo periódico neo que defienda la especie, patrocinada otras veces, de que el cólera es el castigo que Dios envía a los malos cristianos.

Y aquí me recojo.

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, miércoles 11 de septiembre de 1867
año IV, número 99
página 4

Cabos sueltos

La Lealtad, tratando de la política europea, entona con cierta malicia esta voluptuosa habanera:

Mamá, que me pega el chacho.
—Deja la niña, sangón;
que tu tienes once años,
y la niña veintidos.

¡Canario! Padre Sánchez, se nos va Vd. echando a perder.

¿Dónde ha aprendido Vd. eso?

Nosotros, que no somos curas, no conocíamos esa cancioncita.

¿La canta Vd.?

 


Gil Blas (segunda época)
Madrid, sábado 5 de octubre de 1867
año IV, número 106
página 4

El doctor Sangredo

Los inválidos

[...] Alimentadlos con mimo; leed en sus frugales comidas un parrafito del padre Sánchez o un apólogo del barón de Andilla, y luego renegad en coro. [...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 21 de noviembre de 1867
año IV, número 5
página 3

Gacetilla nea

¡Con cuánta razón dijo el sabio que en la vida anda siempre mezclado y confundido el placer y el dolor, la vida y la muerte!

Ya las cien trompetas de la fama anuncian el próximo nacimiento de La Constancia; pues bien ¡oh dolor! las mismas trompetas anuncian simultáneamente la muerte de La Lealtad.

La Lealtad ha muerto: séale la tierra húmeda.

Esto es tan natural, que parece justo. La lealtad del padre Sánchez y la constancia del Sr. Nocedal no caben juntas en el palenque periodístico, ni en ningún otro palenque.

Pero no crean Vds. que La Lealtad deja por eso de publicarse; no, La Lealtad que ha muerto es La Lealtad política; para diversión nuestra, queda todavía la impolítica.

Examinada con algún detenimiento, en la conducta del Padre Sánchez se ve algo de diplomacia. «Yo, dice, separo completamente las cuestiones políticas de las cuestiones religiosas. Los intereses que yo defiendo estarán muy por encima de las pequeñas pasiones de partido y de bandería.» –¡Bien parlao, papá Sánchez! ¡Que le entren a Vd. moscas!

Figúrense Vds. ahora con qué cara se va a presentar el jefe in partibus de la hueste neo-católica, diciendo precisamente lo contrario.

¡Oh témpora! ¿Quién hubiera podido presumirlo? Donde menos se piensa salta la liebre; al Sr. Nocedal le ha salido un temible enemigo, con el cual de seguro no contaba.

Porque lo más bueno de todo esto es que las ideas que, según dicen, piensa defender La Constancia son muy parecidas a las que ha sostenido La Lealtad.

Pero oportunamente dice el adagio: Bien vengas mal si vienes solo; en estos últimos días todo son contratiempos para el Sr. Nocedal: los neo-católicos desconocen su autoridad y son osados a combatirle. El Padre Sánchez le vuelve la espalda, y se va con su lealtad a otra parte, y los periódicos publican el discurso célebre leido en la Academia de Jurisprudencia.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 24 de noviembre de 1867
año IV, número 6
páginas 2-3

Gacetilla nea

Nos hemos equivocado. La Lealtad no ha muerto, ni siquiera se ha hecho impolítica. Lo que hay es pura y simplemente una cuestión de maravedises. El depósito del periódico neo ha sido retirado por quien podía hacerlo, y todo está reducido a reponerlo. Cuando esto se haya hecho, La Lealtad continuará mezclando agradablemenmte la religión y la política. Ya nos parecía extraña tan magnánima resolución en el padre Sánchez.

Continuamos pues con cuatro periodiquitos neos, y como si estos no fuesen bastantes para nuestro solaz y [3] contentamiento, acabamos de leer en La Correspondencia esta agradable noticia:

«Ya está autorizada la publicación del nuevo periódico político La Constancia.»

Es decir, que ya tenemos en campaña al Sr. Nocedal. ¿No han visto Vds. el prospecto de La Constancia? Pues es un documento notable. Pequeño, eso sí, pero malito. [...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 1º de diciembre de 1867
año IV, número 8
página 2

Gacetilla nea

(Habanera.)

Me gustan todos, –me gustan todos,
me gustan todos, –en general;
pero Carulla, –pero Carulla,
pero Carulla, –me gusta más.
–Chiquilla, ni digas eso
que ofendes a Nocedal.
–Don Cándido no se enfada
porque digo la verdad.

¡Ah padre Sánchez –del alma mía,
tenga usted juicio, –no riña usté;
que ya le dicen –sus enemigos
que nunca supo –bien el francés!
Mire usté, papá, que es esto
cuanto me queda que ver.
¡Vildósola o su diario
se está haciendo descortés!

[...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 1º de diciembre de 1867
año IV, número 8
página 4

Cabos sueltos

Entre Vildósola y el P. Sánchez se ha entablado una graciosa polémica, con motivo de una carta del famoso godo el P. Maldonado

Pues señor, entre padres anda el juego.

——

¡Esto sí que es curioso!

La Regeneración y La Lealtad, o mejor aún, el padre Sánchez y el Sr. Vildósola se están poniendo como un trapo.

La Regeneración dijo el otro día que el padre Sánchez no sabía francés.

Quizá mañana diga La Lealtad que el Sr. Vildósola no sabe castellano.

Y lo gracioso es que podría suceder que los dos tuviesen razón.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 5 de diciembre de 1867
año IV, número 9
página 3

Luis Rivera

A través de los baños minerales
(historia de un soltero cursi)

[...] Aquí pudo decir Pacholí como el P. Sánchez: ¡Se nos acabó la paciencia! Y en efecto, se le había acabado; [...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 5 de diciembre de 1867
año IV, número 9
página 3

Cabos sueltos

El P. Maldonado llama miope al P. Sánchez.

Y el P. Sánchez jura defender a todo sacerdote que se halle en posesión de su honor.

¡Aten Vds. cabos a estos dos padres!

* * *

La polémica de los dos periodiquitos neos, que principió por ser grotesca, va a concluir por hacerse repugnante.

Cuarenta y cinco veces llama el P. Sánchez calumniador al Sr. Vildósola.

Treinta y cinco llama el Sr. Vildósola embustero al P. Sánchez.

Por algo menos hemos visto llevar a muchas mujeres a la prevención.

* * *

El artículo en que La Lealtad replica a La Regeneración se titula Lenguaje de taberna.

Es decir, lenguaje de neos.

Esto nos recuerda al sereno de la calle de Sevilla la noche de un escándalo a la puerta del café Europeo.

—¿Qué ha sido eso, sereno? preguntó un curioso.

—Nada; dos caballeros que disputaban porque uno había quitado la capa a otro. ¡Cosas de ellos!

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 8 de diciembre de 1867
año IV, número 10
página 1

Theodoros enamorado

[...] —Y... mira. Me he suscrito a los principales periódicos de Inglaterra, Francia y España. Aquí tengo El Times, El Charivari y El Diario de Teatros. Por ellos se que en Inglaterra hay una reina que se llama Victoria, que es muy guapa, y muy santa, y muy buena; que en Francia hay un músico que se llama Napoleón y un emperador que se llama Ofembach... o al contrario, yo no sé ya lo que me digo; y que en España hay un valentón que se llama el P. Sánchez y un bufo llamado Arderius.

Lo del bufo y lo del padre y lo del emperador y lo del músico me tiene a mí sin cuidado... y a cualquiera, ¿verdad? pero chico, lo de la reina guapa, y santa, y buena, me ha partido; porque a mí me convenía mucho una mujer así. [...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 19 de diciembre de 1867
año IV, número 13
página 2

Gacetilla nea

Dinero: esta palabra nos hace recordar que La Lealtad, más feliz que muchos conocidos nuestros, ha podido encontrarlo. Mentira parece; pero hay que creerlo aunque lo diga La Lealtad.

El periódico del P. Sánchez volverá a ser político (buena falta le hace) desde el día 23 del corriente; así lo declara muy orondo y muy satisfecho en una advertencia colocada a la cabeza de sus últimos números.

——

Es verdad que el P. Sánchez añade que se ha visto en la precisión de buscar el dinero en las provincias: gentes hay que serían capaces de ir a buscarlo al extranjero, a Ultramar y hasta al infierno.

¿Mas por qué buscarlo en provincias? ¿Será porque de lejos tenga más simpatías el P. Sánchez que de cerca?

——

Además, ¿qué diferencia hay entre el dinero cortesano y el de provincias?

Nuestros lectores creerán inocentemente que no hay ninguna: eso mismo creíamos nosotros; pero el P. Sánchez, que por lo visto es un lince en esas cuestiones, se ha servido decirnos que estábamos equivocados.

——

Entre el dinero provinciano y el madrileño hay una semejanza y una diferencia.

Uno y otro sirven para cubrir atenciones como la de constituir un depósito, por ejemplo. Tal es la semejanza.

Pero el dinero de Madrid crea compromisos que pueden tal vez embarazar la marcha independiente del periodista, lo cual, según dice La Lealtad, y ya sabrá por qué lo dice, no sucede con el dinero de provincias.

Tal es la diferencia.

——

Mientras llega el famoso día 23, mil veces venturoso por el nuevo aspecto del periódico neo y por la gran lotería de Navidad, el diario del P. Miguel se entretiene en publicar lindísimos versos. Verbi-gratia:

Cantad al blasfemo
y al genio brutal... (¡Ah, bruto!)
que quiere en su nombre
del vientre del hombre
hacer un dogal. (¡Animal!)

No se asusten Vds., que ya no copiamos lo demás. Ahora calculen si los pobres suscritores de La Lealtad desearán con ánsia que llegue el dichoso día 23.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 26 de diciembre de 1867
año IV, número 15
página 1

Aguinaldos

[...] ¡Ah! Si los besugos tuvieran un periodiquito como el P. Sánchez, ya nos probarían que éramos unos bárbaros. [...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 26 de diciembre de 1867
año IV, número 15
página 3

Gacetilla nea

A Carulla le ha salido un competidor. La Lealtad anuncia que el P. Sánchez va a partir hacia Roma dentro de pocos días; y añade que también dirigirá correspondencias.

Cuanto más lo pienso, más me convenzo de que el señor Arbol y el P. Sánchez no caben juntos en La Lealtad.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 26 de diciembre de 1867
año IV, número 15
página 4

Cabos sueltos

También el P. Sánchez va a dar su paseito por el extranjero.

Lo celebro.

Desde allí piensa escribir.

Ya no lo celebro.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 29 de diciembre de 1867
año IV, número 16
página 2

Revista

[...] Acaba de llegar un sujeto que trae noticias de la Habana y Puerto-Rico. Todos los hombres que profesaban ideas retrógadas se han salvado en los últimos terremotos.

¡Oh! ¡La idea nea!

Cuenta el viajero que la tierra tembló porque se supo lo de Nocedal y El Pensamiento.

El P. Sánchez se va a dar un paseito.

Nocedal engorda. Tejado enflaquece. ¿Qué es esto? [...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 29 de diciembre de 1867
año IV, número 16
página 4

Gacetilla nea

Me repugnan los diarios neo-católicos, ¿podreis creelo? Bástame tener uno a la vista, para sentir dolor en la cabeza y en el estómago. Calculad ahora cuáles serán mis sufrimientos, viéndome precisado a leer una por una las elucubraciones científicas de El Pensamiento, a examinar con cuidado los arranques del P. Sánchez, las atrocidades del Sr. Arbol, los disparos de Vildósola, y lo que aún es peor que todo esto, las epístolas inocentes del infeliz Carulla.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 29 de diciembre de 1867
año IV, número 16
página 4

Cabos sueltos

La Lealtad continúa insertando en sus columnas composiciones poéticas. ¡Infelices suscritores! cuando creían que desde el día 23 no volverían a martirizarlos, se descuelga el periódico del P. Sánchez con una composición en verso latino, que es lo que hay que ver.

¡Pues no digo nada de una oda al nacimiento del hijo de Dios que publicó el día 24!

Leed este pedacito:

Luchando en el fragor de la existencia,
de donde sube al trono de la gloria
a contemplar la hermosa Providencia,
y terrenal memoria
ya no tener, que el alma que va al cielo,
olvida las misiones de este suelo.

Y decidme con franqueza si lo entendeis: por mi parte aún no he podido descifrarlo.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 9 de enero de 1868
año V, número 19
página 1

Los grandes ruidos
y los grandes silencios

[...]

Poco diré sobre tan grandes cosas
que todo el mundo sabe,
desde el Cid Campeador hasta Carulla,
de Homero al padre Sánchez.

[...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, jueves 30 de enero de 1868
año V, número 25
página 2

El partido fantasma

[...]

El padre Sánchez enfermo
en el extranjero está,
Villoslada tiene muermo,
y Carulla no vendrá.

Y todos quieren comer,
y todos quieren brillar,
todos se quieren poner
los trapos de cristianar.

Ese bando impenitente
odia la Constitución;
el pobre no tiene gente,
pero sí mala intención.

Llaman partido fantasma
a ese bando deslucido;
¡que así lo llamen me pasma!
Ni es fantasma ni es partido.

[...]

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 16 de febrero de 1868
año V, número 30
página 1

Examen

—¿Está el señor?
—Pase Vd. adelante.
—Vengo recomendado por el sacristán de mi pueblo para ver si puede Vd. hallarme en Madrid una buena colocación.
—Efectivamente, me ha escrito sobre Vd. ¿Y qué clase de colocación quiere Vd.?
—Cualquiera.
—¿Qué ha estudiado Vd.?
—De todo un poco, como quien dice, nada.
—Siéntese Vd., que voy a hacer un ligero exámen...
—Me siento, con su permiso.
—¿Qué idea tiene Vd. de la astronomía?
—Una idea muy pobre.
—¿Quién era Galileo?
—Un impío que fue condenado por la Inquisición.
—¿Qué sostenía Galileo?
—Una barbaridad, que la tierra se mueve y el sol está quieto. ¡Bonito es el sol para consentirlo!
—¡Bravísimo! ¿Qué opina Vd. del mundo?
—Que está perdido.
—¿Y de la sociedad?
—Que está muerta.
—¿Y de la familia?
—Que está deshecha.
—¿Y de la ciencia?
—Que pervierte al hombre.
—¿Y del arte?
—Que pervierte a la mujer.
—¿Y de la literatura?
—Que está podrida.
—¿Y del teatro?
—Que relaja las costumbres.
—¿Y del progreso de la industria?
—No me hable Vd. de progreso, porque me pongo nervioso.
—¿Cuantas son las verdadera notabilidades que usted conoce?
—Tres.
—¿Cuáles son?
—Luis Veuillot, Nocedal y Carulla.
—¿Quién es grande?
—Gabino.
—¿Quién es elocuente?
—Vinader.
—¿Quién es poeta?
El padre Sánchez.
—¿Quién es bravo?
—Vildósola.
—Contra estas siete bocas de oro, ¿hay siete enemigos?
—Sí, padre, los siete periódicos liberales de Madrid.
—Diga Vd. sus nombres.
La Iberia, Las Novedades, El Universal, La Nación, El Imparcial, GIL BLAS y El Eco Nacional.
—¿Qué defienden esos enemigos?
—La libertad, el progreso y la civilización, o lo que es lo mismo, el error, el absurdo y la barbarie.
—¿Y nosotros?
—La verdad, la luz y la verdadera ciencia.
—El hombre que tiene familia, ¿cómo cumple con la ley de Dios?
—Honrando padre y madre.
—Y el que tiene un periódico, ¿cómo cumple con él?
—Deshonrando el periodismo.
—En política, en literatura, en artes, en la familia, en público y en privado, ¿reconocerá Vd. algo bueno en el que sea liberal?
—No, señor.
—¿Los liberales tienen talento?
—Jamás.
—¿Quién era Quintana?
—Un zarramplín.
—¿Y Jovellanos?
—Jovellanos tuvo una cosa buena: el prólogo de Nocedal.
—¿El pensamiento es libre?
—No, señor, eso quisiera él.
—¿Y la razón?
—Es la enemiga del hombre.
—¿Sería conveniente prohibirla?
—Siempre.
—En tiempo del absolutismo, ¿había pobres y criminales?
—Ni uno para remedio.
—¿Quiénes fueron José María y Jaime el Barbudo?
—Liberales socialistas.
—En resumen: ¿cuándo había verdadera libertad, verdadera ciencia, verdadera civilización, verdadera abundancia, verdadera moralidad?
—En los tiempos en que no había nada de eso.
—¡Sublime! ¿cómo se llama el hombre en su estado de perfección?
—Se llama neo.
—No hay más que hablar, es Vd. un genio, y desde hoy entra Vd. de redactor en mi periódico.
—¿Con sueldo?
—Con sueldo.
—Muchas gracias. ¡Viva el periodismo!
—¿Qué es lo primero que va Vd. a escribir?
—Un artículo contra el periodismo.
—Jóven, Vd. es neo de pura sangre. El olvido público le hará justicia.

 


Gil Blas (tercera época)
Madrid, domingo 31 de mayo de 1868
año V, número 60
página 4

Cabos sueltos

El presbítero D. Miguel Sánchez, director que ha sido de La Regeneración, va a dar a luz en breve una obra titulada Felipe II y la liga.

Liga se necesita para cazar suscritores a obras semejantes.


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Miguel Sánchez López 1860-1869
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