Filosofía en español 
Filosofía en español


En el acto de imponer la Medalla de Trabajo a D. Leandro Gascón Pablos

(Fuentes de Bejar –Salamanca–, 1 de marzo de 1947.)

Excmos. e Ilmos. Sres., D. Leandro Gascón, camaradas: Este acto de condecorar con la más alta distinción el esfuerzo de un trabajador y empresario aquí, en Fuentes de Béjar, si nos llena de alegría por lo que tiene de justicia el premiar tan justamente los méritos, nos enorgullece también por el carácter social que tiene. Porque hoy, aquí, reunidos en íntima camaradería y con abierta sinceridad una magnífica sección del ejército del trabajo, se dispone a premiar al distinguido soldado que ha sabido conquistar la condecoración más alta en esa gran batalla de la paz, tan fecunda y tan honrosa como en la guerra y que nosotros consideramos tan digna, porque es también una jornada de trabajo y de sacrificio que hacemos con el corazón templado, con el alma firme.

Al encontrarnos ante este magnífico cuadro de solidaridad entre hombres a quienes la vida une en comunes tareas, parece que nos hallamos ante el momento cumbre de una gran batalla en la que todos los hombres de España debemos sentirnos hermanos y debemos estar unidos por una voluntad común de justicia, de paz, de orden y de trabajo. Porque si todos en la Patria viviesen este ambiente de comprensión y hermandad, el problema social que atravesamos sería el primer escalón de la gran victoria de España.

Y nada más, porque la abundancia de palabras en este acto es inútil, puesto que se apoya en sólida base de realidades llevadas a cabo por toda una vida de esfuerzos y de tantos beneficiados.

El mejor homenaje que podemos rendir a quienes saben cumplir estrictamente con su deber es nuestra gratitud, nuestra admiración, nuestro cariño, y seguir el ejemplo que toda su vida nos señala.

Don Leandro Gascón: Al lado de la alegría de todos los que os quieren y respetan queremos unir la nuestra, y al estrechar esa honrada mano de trabajador queremos deciros: seguid así. Este acto, de verdadera comunión y hermandad, y con esta obra social, estable y eficaz, con la que podéis servir a los intereses de vuestros hombres y a los vuestros propios, significa una lanza por España.

¡Arriba España! ¡Viva Franco!

 
(Béjar –Salamanca–, 1 de marzo de 1947.)