Edición de las obras de Pedro Sánchez
dispuesta por Atilana Guerrero Sánchez
Fundación Gustavo Bueno 2013
1584 Árbol de consideración y varia doctrina. Plantado en el campo fertilísimo de los venerables misterios de la semana Santa. Del que se cortan siete ramos muy hermosos que van en la procesión el Domingo de Ramos, uno para cada día desta semana. Y son siete consideraciones principales de la Pasión del Redemptor. Y estos ramos están cargados de flores y frutos de otras consideraciones particulares de diversas materias agradables y provechosas para todo Christiano en qualquier tiempo. Una adición de los misterios de la Resurrección del Redemptor. Y la vida de Adan. Y la del Antecristo, y la de los siete durmientes, y otras cosas dignas de saber. (Toledo 1584, [9] + 457 + [7] folios.)
1590 Historia moral y philosophica. En que se tratan las vidas de doce Filósofos, y Príncipes antiguos, y sus sentencias, y hazañas: y las virtudes moralmente buenas que tuvieron. Y se condenan los vicios de que fueron notados. Apurando lo bueno, y desechando lo malo que tuvieron. Sacando de todo ello la médula y sustancia de lo mejor y más provechoso, y moralizándolo, para utilidad de nuestras costumbres, y vida Cristiana. Y en el último lugar, y fin de la obra, se trata la vida de la Muerte, que es el fin y remate de las cosas humanas. Con algunas consideraciones provechosas para la buena vida. (Toledo 1590, [10] + 372 + [7] folios.)
1595 Triangulo de las tres virtudes Theologicas, Fe, Esperanza, y Caridad. Y Quadrangulo de las quatro Cardinales, Prudencia, Templanza, Justicia, y Fortaleza. En que se tocan algunas de sus propiedades y excelencias, y historias muy provechosas: y alguna doctrina de todas facultades: dedicado al glorioso Apostol S. Pedro. (Toledo 1595, [9] + 294 + [8] folios.)
Criterios seguidos en esta edición
Se ha procurado la mayor fidelidad en la traslación de estos textos, escritos e impresos en español a fines del siglo XVI, al español de inicios del siglo XXI. Ni se ha pretendido hacer una edición grafemática (pues facsímiles de estos libros están hoy a la libre disposición de cualquiera en la red) ni tampoco alguna adaptación modernizadora y ridícula, siempre traidora del texto, como las que ejecutan algunos pedantes violadores de los clásicos, que tanto abundan. Hemos adaptado la grafía y la acentuación a los usos del español del presente, pero hemos conservado escrupulosamente el vocabulario y variantes utilizadas por el autor, aunque sean hoy de poco uso, aún presentes en el diccionario de la Academia de la Lengua (por ejemplo, “ascondido”) o cuya actualización nada mejoraría la comprensión (por ejemplo, “perficionar” en lugar de “perfeccionar”, “respecto” en lugar de “respeto” o “mandado” en lugar de “mandato”). También hemos conservado formas verbales de la época (por ejemplo, “quisiéredes”) que resulta superfluo modernizar. Algunos otros criterios ecdóticos que hemos seguido son estos:
- Hemos procurado conservar la puntuación, excepto en contadas ocasiones en que ha parecido conveniente introducir alguna coma o punto para aclarar el sentido de la frase. Hemos conservado siempre el uso del punto y aparte. El paréntesis, en el texto original, a veces tiene el valor de coma y no se cierra: hemos optado en unos casos por cerrarlo y en otros por sustituirlo por una coma. Incorporamos los signos de abrir interrogación y admiración, que no se utilizan en el texto original, así como diéresis, &c.
- Conservamos el uso de la primera letra mayúscula en nombres comunes, para respetar la importancia que les atribuye el autor en su texto: sobre todo son gentilicios (“Romanos”), nombres de escuelas filosóficas o que hacen referencia a sistemas de ideas (“Gentiles y Cristianos”), &c.
- Se resuelven las abreviaturas (q. / que; nro. / nuestro, &c.) y se descomponen las aglutinaciones (“dellas” / “de ellas” o “destos” / “de estos”).
- Se destacan en letra cursiva las citas directas de frases de personajes o autores, al igual que se conserva la cursiva que, en el original, aparece reservada para las expresiones latinas.
- Hemos colocado entre {llaves} y en el cuerpo del texto las numerosas citas que en el original aparecen en los márgenes. Y, para evitar reiteraciones, cuando se repite un nombre tanto en el texto como en el margen le añadimos simplemente un asterisco. A veces el asterisco aparecerá junto a un rótulo que se ha repetido también en el margen, a modo de índice (por ejemplo, “Figura del tiempo”).
- Cuando las citas marginales presentan una lectura dudosa debido a la borrosidad tipográfica del original consultado, no salvadas por las fotocopias que hemos manejado de otros ejemplares, advertimos la duda con un signo de interrogación (por ejemplo, en “Math. 2?” queremos decir que es dudoso el número 2, no el autor, en cuyo caso se consignaría: “Math.? 2?”).
- Todas las erratas evidentes se han corregido sin dejar constancia de ello, así como las «Erratas» señaladas por el impresor en alguna de las obras.
- Señalamos en el texto, entre corchetes, el lugar que corresponde al inicio de cada página impresa, indicando el número de hoja cuando está foliada, recto o vuelto, o con números romanos en minúscula cuando las hojas, como en los preliminares, no van numeradas.
- Hemos procurado mantener las jerarquías en la composición tipográfica y reproducimos los grabados originales, también los que el impresor utilizó como letras capitulares.
- Respetamos la forma en que el autor escribe los nombres o se refiere a quienes menciona. Poco a poco esos autores irán contando con enlaces a las entradas correspondientes del Averiguador.