Filosofía en español 
Filosofía en español

Teodoro de Almeida CO  1722-1804

Teodoro de Almeida 1722-1804

«Almeida (Teodoro). Nació en Lisboa en 1722. Fué de la Congregación del Oratorio, y el primero que se atrevió a combatir en Portugal la física que hasta su tiempo se había enseñado en aquellas escuelas, sustituyendo sus errores con los buenos principios. Escribió en portugués en 5 tomos la obra titulada Recreaciones filosóficas, causando con ella una verdadera revolución en las ciencias físicas, y aun sufriendo no pocos vejámenes y persecuciones por los entusiastas de las antiguas teorías que en ella rechazaba. Partidario de la corte Romana, se malquistó cuando la famosa desavenencia entre el Santo Padre y el rey José I de Portugal con el marqués de Pombal, entonces ministro, teniendo que acogerse a Francia hasta la caida de este. Vuelto a Portugal se le nombró miembro de la Academia de Lisboa, y compuso y publicó su novela o poema de El hombre feliz independiente del mundo y de la fortuna, obra que llegó a alcanzar bastante aceptación. No faltó sin embargo quien la ridiculizára con el título satírico del Feliz independiente; y aun hubo español que en pocos días hizo su verdadera crítica, así moral como literaria, en el poema que lleva por título La mujer feliz.» (Enciclopedia española del siglo diez y nueve, o biblioteca completa de ciencias, literatura, artes y oficios, &c., Ignacio Boix, Madrid 1845, tomo X, página 38.)

«Almeida (Teodoro). De la congregación del Oratorio, nació en Lisboa en 1722. Fue el primero que en Portugal sustituyó en la física a las vanas y absurdas teorías que allí dominaban, el cálculo y la experiencia. Murió en Lisboa en 1803. La obra principal que escribió, y por la que ocupa un lugar muy distinguido entre los sabios, lleva por título Recreaciones filosóficas.» (Enciclopedia popular de Las Novedades. Diccionario de la conversación y la lectura, Madrid 1859, tomo 1, página 138.)

«Teodoro de Almeida. Sócio fundador da Academia Real das Ciências de Lisboa, Teodoro de Almeida era natural daquela cidade, onde nasceu a 7 de Janeiro de 1722, e morreu a 18 de Abril de 1804. Viveu em França desde 1767 até 1778, talves, para evitar as desconfianças do ilustre Ministro de D. José. A Filosofia Racional deste escritor pode ver-se nos volumes 7°, 8° e 9° da Recreaçáo Filosófica. No sétimo volume trata da Logica, no oitavo da Ontologia e Psicologia e no nono de Teodiceia e da Harmonia da razáo como a religiáo. (...) A sua Filosofia já se destaca muito do Sensualismo, e respira certo ar de independência em que nem sempre foi imitado pelos outros filósofos seus contemporáneos. (...)» (José Joaquim Lopes Praça (1844-1920), História da filosofia em Portugal, Coimbra 1868, tercer periodo, sección I, IX. Edición de Pinharanda Gomes, Guimaraes, Lisboa 1974, págs. 244-251; ed. revisada, Guimaraes, Lisboa 1988, págs. 251-257.)

«Aunque los tratados apologéticos hasta aquí citados son los más notables bajo el aspecto científico y los más dignos de leerse, no fueron, con todo eso, los más populares y leídos por nuestros padres. Cupo tal honor a otros dos libros que podemos llamar de vulgarización amena, y que hoy mismo rara vez faltan en ninguna casa cristiana del antiguo régimen. Es el primero la Armonía de la razón y de la religión (Armonía de la razón y de la religión, o Teología Natural, obra escogida del P.D. Teodoro de Almeida, contra las absurdas opiniones de los filósofos del día. Este tratado particular sirve de tomo IX, y es el complemento de la Recreación Filosófica. Madrid 1798, en la Imprenta de la Rifa del Real Estudio de Medicina Práctica, 8°, 368 páginas sin las preliminares, hay muchas ediciones, entre ellas una reciente de la Librería Religiosa de Barcelona) o diálogos sobre la Teología natural, compuestos en lengua portugesa por el P. Teodoro de Almeida, del Oratorio de San Felipe Neri, de Lisboa, a quien, no sin hipérbole, han llamado el Feijóo portugués, escritor fecundísimo, fiel a la divisa instruir deleitando, cuyas Recreaciones filosóficas contribuyeron, juntamente con el Teatro crítico y con el Espectáculo de la Naturaleza, del abate Pluche, y con las Reflexiones filosóficas, de Sturm, a difundir entre los jóvenes y las mujeres y el vulgo no erudito de la Península una noticia más o menos superficial, más o menos razonada, de los fenómenos naturales y de los adelantos de la física experimental. Por tal manera, el P. Almeida, hombre cándido, modesto y virtuosísimo, vino a lograr extraordinaria fama, multiplicándose enormemente las ediciones de sus obras, que le dan derecho a figurar entre los más beneméritos propagadores de la general cultura, si bien nunca pasa de exponer con elegante perspicuidad observaciones y noticias muy comunes. Era tal el prestigio de su nombre, que hasta una especie de novela que compuso, intitulada El hombre feliz independiente del mundo y de la naturaleza, alcanzó, por dos o tres generaciones sucesivas, innumerables lectores (de fijo más que los que tenía Cervantes), y eso que a pesar de su moralidad acrisolada, es obra tan soñolienta, lánguida y sin gracia, que sólo atendida la penuria de novelas españolas en el siglo XVIII y primera mitad del XIX llega uno a comprender cómo pudieron hincarle el diente ni las mismas contemporáneas de Richardson, habituadas a los innumerables volúmenes de la Clarisa Harlowe y de la Pamela. En materias filosóficas, el P. Almeida, que comenzó a escribir en la primera mitad del siglo, y que hasta cierto punto hereda el impulso del P. Tosca y de Feijóo, propende al cartesianismo, y sigue a Descartes hasta en lo de negar el alma a los brutos. En los mismos diálogos de la Armonía, cuando trata de la distinción entre la materia y el espíritu y de sus constitutivos esenciales, descubre huellas evidentes de las Meditaciones cartesianas. Por lo demás, la Armonía es una teodicea popular, fácil, agradable y sencilla, en que se prueban con los argumentos más acomodados a la general comprensión la existencia de Dios, la ley natural, la espiritualidad e inmortalidad del alma, la necesidad de la revelación y del culto, y los premios y castigos de la otra vida. Todavía más famoso que el libro del P. Almeida fue el Evangelio en triunfo, de Olavide (...).» (Marcelino Menéndez Pelayo (1856-1912), Historia de los heterodoxos españoles (1880, libro VI, capítulo 3). CSIC, Madrid 1963 (Edición Nacional, tomo 39, 2ª edición), tomo 5, págs. 406-407.)

«O padre Teodoro de Almeida segue os passos de Verney no seu excelente livro, Recreações Filosóficas. Ele foi mais além; porque náo só escreveu na língua natal, mas procurou divulgar por todas as classes do país os estudos filosóficos e torná-los inteligíveis a todos por meio de uma linguagem simples e atraente. Este passo foi de grande importância, porque até aí a ciência tinha um aspecto puramente académico, cingindo-se somente às universidades e escolas do reino; o padre Teodoro de Almeida quis vulgarizá-la e torná-la acessível a todos. A sua obra, única no se género, teve grande influência no país e marca um aparecimento notável no campo das ciências pátrias. Na carta do rei D. José o nosso venerando filósofo faz um verdadeiro quadro do estado dos espíritos, da actividade intelectual que ia por todo o país, e do estado da filosofia depois de Verney sobretudo. (...). Diz que náo segue autor determinado, mas o que sinceramente entende que mais se chega à verdade. Segundo este nosso filósofo, a filosofia abrange todas as ciências que nela formam un corpo de doutrinas único. Quando a filosofia se ocupa da naturaleza toma o nome de filosofia natural, que ele trata nos seis primeiros volumes; quando discorre sobre os actos do entendimento chama-se filosofia racional, que faz objecto do 7° volume. A parte que trata dos princípios e verdades gerais e comuns a todos os seres, ou das generalidades e abstracções, chama-se filosofia trans-natural, ou metafísica, que é exposta no volume 8°. A que trata de Deus, tanto quanto é permitido à razáo humana, chama-se teologia natural, deixando aos teólogos o que é da revelaçáo e do dogma, que está fora do alcance de filosofia. Aquela parte é tratada no volume 9°. Quando a filosofia se ocupa, por último, dos actos da vontade humana, toma o nome de filosofia moral, ou ética, que faz objecto do 10° e último volume (o conjunto da obra, na 1ª ediçao, intitula-se Recreasáo Filozófica ou Diálogo sobre a Filozofia Natural, Lisboa, 10 vols., 1751-1799). (...) Faltou a Teodoro de Almeida um discípulo que corrigisse o método, tornando-o ainda mais científico, e colocasse esta filosofia na altura das ciências naturais e biológicas modernas. Portugal teria aberto caminho à filosofia positivista actual. Mas as faltas das obras de Joáo de Castro, de Verney e de Teodoro de Almeida, provenientes do estado em que as ciências ainda se encontravam no primeiro meado do século passado, froam supridas no nosso país pelos progressos ulteriores daquelas ciências. (...) Teodoro de Almeida, como Verney, dedicou-se do coraçáo ao estudo das ciencias físicas, onde bebeu as suas ideias filosóficas. é ainda autor de umas Cartas físico-matemáticas de Teodósio e Eugénio, para servirem de complemento às Recriações Filosóficas (1784), as quais foram traduzidas para espanhol, e de uma outra obra intitulada Institutiones Physica ad usum Scholorum, 1785. Os primeiros volumes das Recreações Filosoficas tiveram tal aceitaçáo do público, que em pouco tempo se fizeram deles umas poucas de edições!» (José de Arriaga (1848-1921), A Filosofia portuguesa 1720-1820, (1889), Guimaraes, Lisboa 1980 [extracto de História da revoluçáo portuguesa de 1820], págs. 55-82.)

«Almeida (Teodoro). Biog. Sabio y erudito sacerdote portugués, crítico y naturalista, nacido en Lisboa en 1722 y muerto en 1803. Ingresó como religioso en la Congregación del Oratorio y fundó la Academia Real de Ciencias de Lisboa; se dedicó al estudio de las ciencias naturales y físicas. Unido íntimamente con la Santa Sede, tuvo que emigrar a Francia, por efecto del célebre rompimiento entre el papa y el rey José I, donde permaneció diez y ocho años consagrado a la enseñanza. Al regresar a la patria, se dedicó a la corrección de sus obras, entre las que descuella Recreación filosófica o Diálogo sobre la filosofía natural. Escribió además: El hombre feliz independiente del mundo y de la fortuna, Armonía de la Razón y de la Religión (1742), El amigo de la Religión y del rey, Tesoro de paciencia escondido en las llagas de Nuestro Señor Jesucristo, &c.» (Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana, José Espasa, Barcelona 1909, tomo IV, pág. 811.)

«Misión análoga a la de Feyjóo, cumplió en Portugal el P. Teodoro Almeida (1722-1803), del Oratorio de S. Felipe Neri, cuya influencia se dejó intensamente sentir en toda la península, merced a las repetidas traducciones de sus obras. Las Cartas físico-matemáticas de Teodoro a Eugenio, forman un tratado de Física, con algo al final de Cosmología y descripción de algunos aparatos especiales, todo enderezado a la divulgación de las ciencias físicas. Al mismo fin dirige su Recreación filosófica o Diálogos de Filosofía natural. No confiesa con sinceridad su dirección mental y, como Feyjóo, alardea de ortodoxia y, aunque en el preliminar escribe: "No he de ceñirme a escuela alguna, ni he de seguir ciegamente a autor alguno determinado, sino lo que sinceramente comprendiese que se acerca más a la verdad", en el compendio de Historia de la Filosofía que precede a las Recreaciones, se nota el desvío de la escolástica, y tanto en el título Filosofía natural, cuanto en la índole de las materias, su predilección por el empirismo. En efecto, comienza exponiendo los conceptos de materia, forma, gravedad y peso; estudia los elementos, los sentidos, la fisiología de los brutos (el alma de éstos es pura materia), las plantas, astronomía y geografía físicas; sigue una Introducción a la filosofía racional (lógica, patología del entendimiento y dialéctica) y sólo en el último y menos voluminoso de los tomos aborda la metafísica sin tocar más que algunos puntos. Es, como el español, un pensador práctico o un filósofo con la menor levadura posible de filosofía.» (Mario Méndez Bejarano, Historia de la filosofía en España, Renacimiento, Madrid s.f. (c1927), págs. 347-348.)

«Aunque no lo diga, sigue [José Cayetano] Rodríguez en este punto a Almeida (5. Los escritos de Teodoro Almeida, portugués, fueron tan populares en el Río de la Plata como los de Feijóo, sobre todo su Recreación filosófica o Diálogo sobre la filosofía natural, del que abundan los ejemplares, más o menos descalabrados, en todas nuestras antiguas bibliotecas) contra el parecer de Ferrari, y a Almeida sigue también cuando consigna que "la aceleración del movimiento en la caída de los cuerpos pesados proviene de las velocidades iguales que el cuerpo adquiere en cada uno de los tiempos iguales que emplea en su descenso".» «Señala [José Elias del Carmen] cómo se puede "llegar a la verdad yendo de lo conocido a lo desconocido", y cómo se pueden probar sus conclusiones con los experimentos que abundan en las obras de los filósofos, especialmente en Gravesande y Almeida.» «Niega [Carlos M. González] igualmente que la simple aprensión de un objeto puede ser falsa y, al ocuparse de si puede el hombre tener una idea de la nada y de las cosas negativas, sigue a Almeida, distinguiendo entre idea propia e impropiamente tal.» «Sólo recordaremos que, en una de esas tesis, recurre [Valentín] Gómez a una explicación metafísica para aclarar, y aclara muy poco, un problema físico: "La gravedad es cierta propiedad especial de los cuerpos o sea aquella por la cual se ven atraídos hacia el centro de la tierra. Es naturalmente inseparable de los mismos, puesto que no se concibe ningún cuerpo, ni aun el fuego, que carezca de gravedad. No está bien clara la causa de esta admirable cualidad. Se presentan con graves dificultades las hipótesis expuestas hasta ahora, si se exceptúa la que pone su principio inmediato en la misma ley de Dios, como la expone con su ingeniosidad acostumbrada Teodoro Almeida, y la que puede defenderse como tal mientras no se descubra otra causa creada".» «No sabemos si fue en sus originales, o lo que es más probable, en buenas versiones, o al través de Almeida, pero lo cierto es que llegó [Pantaleón] Rivarola a conocer y a admirar a Newton...» (Guillermo Furlong S.J., Nacimiento y desarrollo de la filosofía en el Río de la Plata 1536-1810, Kraft, Buenos Aires 1952 (págs. 254, 255, 271, 272, 273, 296, 376, 400.)

«O Gabinete de Física Experimental da Casa da Senhora das Necessidades dos Padres do Oratório, devia ter sido, de facto, «magnifico», como o classifica Teodoro no Discurso Preliminar da Recreaçáo. Nada lhe deveria faltar do melhor material do seu tempo, pois beneficiou das dádivas de máos largas de D. Joáo V e continuou a ser motivo de protecçáo do rei seguinte, D. José, até à hora fatídica em que Teodoro de Almeida teve de buscar refúgio no estrangeiro para fugir à sanha perseguidora do marquês de Pombal.» (1982 Rómulo de Carvalho, A física experimental em Portugal no século XVIII, Instituto de Cultura e Língua Portuguesa (Biblioteca Breve n° 63), Lisboa 1982, págs. 57-63, &c.)

«O oratoriano de maior relevo na divulgaçáo a que se dedicou da Física Moderna, e cuyo nome é mais insistentemente recordado, é Teodoro de Almeida, autor da famosa Recreaçáo Filosófica, em dez volumes, como cerca de quatro mil páginas de texto, onde todos os ramos de conhecimentos sáo focados e discutidos com um pendor pedagógico de alto nível. A esta obra se acrescenta uma outra do mesmo autor, tambén extensa, em três volumes, intitulada Cartas fysico-matemáticas. A Recreaçáo, cujo primeriro tomo saiu a público em 1751, e o décimo em 1800, teve diversas reimpressões dos seus volumes, separadamente, ao longo do século XVIII, tendo alcançado alguns deles sete reimpressões, o que demonstra o impacte que a obra teve no público e como foi merecida a fama do seu autor. A Recreaçáo Filosófica ou Diálogo sobre a Filosofia Natural para instruçáo de pessoas curiosas que náo frequentaram as aulas, apresenta-se, como outras obras similares, à maneira de diálogo que se desenrola entre três personagens: Teodósio, que é o próprio autor, no papel de mestre credenciado da Filosofia Moderna; Eugénio, um jovem que quer ser informado das doutrinas científicas do seu tempo; e Sílvio, médico educado segundo a pedagogia escolástica, que faz o papel do reaccionário que Teodósio irá combater para esclarecimento de Eugénio.» (Rómulo de Carvalho, A Astronomia em Portugal no século XVIII, Instituto de Cultura e Língua Portuguesa (Biblioteca Breve n° 100), Lisboa 1985, págs. 27-33, 97-100, &c.; pág. 28.)

Ediciones en español de la Recreaçáo Filosófica

Teodoro de Almeida escribió y publicó en portugués la Recreaçáo Filosófica, en Lisboa, entre 1751 y 1800, en 10 tomos. Entre 1784 y 1799, también en Lisboa y en portugués, con el pseudónimo de Dorotheo de Almeida, publicó 3 tomos de Cartas Físico-Matemáticas, para inteligencia y complemento de la obra principal. De los 10 tomos de la Recreaçáo Filosófica dedica los seis primeros a la filosofía natural, el séptimo a la filosofía racional, el octavo a la metafísica, el noveno a la teología natural y el décimo y último a la teología moral.

Antes de que se hubiera culminado la obra en portugués ya se habían publicado en español, en Madrid, dos ediciones, tanto de la Recreación como de las Cartas. La primera edición española (1785-1787) de la Recreación lo es de los siete primeros tomos, la segunda de los ocho primeros tomos (1792). Las dos primeras ediciones españolas de las Cartas físico-matemáticas (1787 y 1792) lo son de los dos primeros tomos.

Sucedió que los tomos 9 y 10 de la Recreaçáo Filosófica (los dedicados a la teología natural y a la teología moral) se publicaron en español bajo el título de Armonía de la razón y la religión (en 1798 el primer tomo, en 1802 una nueva traducción, por Francisco Vázquez, de los dos tomos). Estos tomos tuvieron más suerte editorial, conociendo una docena de ediciones hasta 1850, incluyendo una en Méjico. Incluso la edición francesa de esta obra, traducida por Mr. Renard y publicada en París en 1823 (2 tomos), no lo fue del portugués, sino de la versión española de 1802 dispuesta por el padre Francisco Vázquez.

De hecho nunca la Recreación filosófica se publicó en español de forma conjunta (los 10 tomos) y bajo tal rótulo: las impresiones españolas tercera (1803) y cuarta (1827) lo son de los ocho primeros tomos de la Recreación filosófica y de los tres de las Cartas físico-matemáticas (en total 11 tomos).

Estos avatares en las ediciones españolas de la Recreación y de las Cartas provocan numerosos errores en las descripciones que repiten diccionarios y bibliografías (que quieren ver, más de una vez, diez tomos que no existieron en las ediciones españolas).

En el n° 17 del Folletín de la Bibliografía de España, de fecha 15 de septiembre de 1845, pág. 2, puede leerse, dentro del epígrafe «Obras científicas del señor don Pedro Mata», lo siguiente: «Recreación filosófica del P. Almeida completamente refundida y puesta al nivel de los conocimientos actuales. Los tratados sobre ciencias físicas naturales y fisiológicas son enteramente nuevos y originales. Once tomos en 8° francés, librería de Rosa, París.» No tenemos más datos de esta edición refundida y actualizada por Pedro Mata.

Recreación filosófica o diálogo sobre la filosofía natural para instrucción de personas curiosas que no han frecuentado las aulas, escrita en portugués por el P. D. Teodoro de Almeida, Traducida al Castellano, Viuda de Ibarra, Madrid 1785-1787, 7 tomos. (El tomo séptimo lleva por título: Recreación filosófica o diálogo sobre la filosofía racional...)

Recreación filosófica, Imprenta Real, Madrid 1792, 8 tomos.

Cartas físico-matemáticas de Teodosio a Eugenio que para inteligencia y complemento de la Recreación Filosófica escribió el P. D. Teodoro de Almeida... Traducida al Castellano, Madrid 1787, 2 tomos, Imprenta Real, Madrid 1792, 2 tomos.

Recreación filosófica (8 tomos) + Cartas (3 tomos), Imprenta Real, Madrid 1803, Tercera impresión, 11 tomos.

Recreación filosófica (8 tomos) + Cartas (3 tomos), Imprenta del Diario, Madrid 1827, Cuarta impresión, 11 tomos.

«Las Recreaciones filosóficas no son acaso, repetimos, la obra de física más acabada, porque esta ciencia ha adelantado desde el tiempo en que se escribió considerablemente en algunas materias; pero es sin disputa la física más propia para descubrir al Autor supremo de todos los seres, en la consideración misma de los que en ella se ponderan. Una experiencia bien sensible no nos deja dudar, que al paso que se han adelantado los conocimientos físicos, se ha escrito de ellos de un modo poco proporcionado para formar naturalistas religiosos, y así se ha visto que todo lo que ha tomado de incremento esta ciencia, ha decaído la de la piedad y la de la religión. Orgullosos y envanecidos algunos escritores modernos por los descubrimientos que han hecho, y que fueron escondidos a los antiguos, parecen haber hecho empeño en separar el principio de donde todo procede, y prescindiendo de él, buscar cómo desconocerle en aquello mismo que debía servirles de medio para descubrirle y de estímulo para adorarle. Así funestamente para la religión, se han visto hombres tan adelantados en el materialismo como lo estaban en las ciencias naturales. Valía, pues, más que no se hubiesen aquellas adelantado tanto.» (“[Prospecto] Recreaciones filosóficas del P. D. Teodoro de Almeida. Se suscribe a esta obra, que constará de 11 tomos en 8.º común con 55 láminas finas…”, Gaceta de Madrid, jueves 3 de mayo de 1827.)

Armonía de la razón y de la religión o respuestas filosóficas a los argumentos de los incrédulos. Dividida en dos tomos. Madrid 1798 [sólo el tomo 1 y con muchos defectos] / Traducida al castellano y aumentada con varias notas, por el R. don Francisco Vázquez, C.R. de S. Cayetano, lector de teología, Imprenta de Villalpando, Madrid 1802, 2 tomos, XVI+362 y XVIII+390 págs. / segunda edición, con Real privilegio, Imprenta de Fuentenebro, Madrid 1807, 2 tomos, XXVI+398 y XVIII+438 págs. / Armonía de la razón... o teología natural. Este tratado particular sirve de tomos IX y X, y es el complemento de la Recreación filosófica. Segunda edición, por D. Mariano Dávila, Imprenta de Villalpando, Madrid 1819, 2 tomos (& Librería de Dochao, Madrid) / Madrid 1820, 2 tomos / tercera edición, Librería de Sánchez, Madrid 1820, 2 tomos. / Librería de la Rosa, México 1840 / Imprenta de A. Pons y compañía, Barcelona 1842, 2 tomos (& Librería de Calleja, Madrid) / Imprenta de F. Cabrera, Alcoy 1848, 2 tomos (& Redacción de la Esperanza, Madrid) / Pablo Riera, Barcelona 1848, 2 tomos / Herederos de la Viuda de Plá, Barcelona 1850, 2 tomos (& Librería de Aguado, Madrid) / Imprenta y librería de Pablo Riera, Barcelona 1850, 2 tomos (& Librería de Olamendi, Madrid).

Otras obras de Teodoro de Almeida publicadas en español

El hombre feliz, independiente del mundo y de la fortuna, o arte de vivir contento en cualesquier trabajos de la vida. Traducción del portugués por José Francisco Monserrate y Urbina. Joaquín Ibarra, Madrid 1783, 3 tomos, XXVIII+280, 303 y 304 págs. / Román, Madrid 1785-1786, 3 tomos / Traducción del portugués con notas por Benito Estaun de Riol, Madrid 1787-1788, 3 tomos / 7ª ed. Madrid 1790, 3 tomos / 8ª ed. Imprenta Real, Madrid 1795-1796, CIV+290 pág. / El feliz independiente del mundo y de la fortuna, o arte de vivir contento en todos los trabajos de la vida. Nueva traducción, mejorada en el estilo y en los versos, por el P.D. Francisco Vázquez, Cano, Madrid 1799, 4 tomos / Madrid 1800, 4 tomos / Madrid 1800, 3 tomos / Madrid 1804, 3 tomos / [edición de Francisco Vázquez] Librería de Sojo, Madrid 1806, 4 tomos / Nueva edición, Imprenta Moreno, Madrid 1829, 683 p. / Imprenta de M. Heras, Zaragoza 1834, 3 tomos (& Librería de Sánchez, Madrid) / Barcelona 1837 / duodécima impresión, Imprenta Calle del Humilladero, Madrid 1842, 3 tomos (& Librería de Sanz, Madrid) / Madrid 1843 / Barcelona 1847, 2 tomos / Imp. d'Olivier, París 1849 (& Librería de Rosa) / Imprenta de Riera, Barcelona 1855, 509 págs. (& Librería Religiosa & Librería de Olamendi, Madrid) / Pablo Riera, Barcelona 1858 / Madrid 1860 / Barcelona 1860, 509 págs. / Barcelona 1869, 509 págs. / Barcelona 1884, 509 págs.

El filósofo solitario. Obra instructiva, curiosa y filosófica, compuesta por un sabio anónimo portugués. Traducida por un amante de la razón y de las letras. Benito Cano, Madrid 1788, 3 tomos / El filósofo solitario. Obra instructiva, curiosa y filosófica, compuesta por el P. D. Teodoro de Almeida... traducida del original y aumentada e ilustrada con varias notas históricas, críticas y filosóficas, así del autor como del traductor. Nueva edición. Imprenta de Cano, Madrid 1818, 2 tomos. (& Librería Europea).

Gemidos de la Madre de Dios afligida y consuelo de sus devotos, con diferentes obsequios ofrecidos a la misma señora, considerada en sus dolores y angustias. Traducción del portugués por F.G.M. Imprenta Real, Madrid 1788, 252 págs. / Juan Francisco Piferrer, Barcelona 1791 / Imprenta Real, Madrid 1797 / ...traducida del portugués por D. Francisco Vázquez García, presbítero. Se dedica a María Santísima, Imprenta y librería de A. Pons, Barcelona 1841 (& Librería de Calleja, Madrid) / Imprenta de Pillet, París 1847 / Imprenta de Arbieu, París 1858 (& Librería de Rosa y Bouret).

Sermones. Traducción por Francisco Vázquez Girón. Librería del Castillo, Madrid 1788, 3 tomos / Madrid 1798, 3 tomos.

Tesoro de paciencia, o consuelo del alma atribulada en la meditación de las penas del Salvador. 3ª ed. Plácido Barco López, Madrid 1788, XXXVI+277 págs. / 5ª ed. Madrid 1793 / traducido por el Dr. D. Benito Estamy y Riol, Imprenta de A. Oliva, Gerona 1826 (& Librería de la V. de Razola, Madrid) / Imprenta de Pillet, París 1840 / Imprenta de D.I. Boix, Madrid 1845 (& Librería de Alonso) / Imprenta de P. Riera, Barcelona 1846 (& Librería de Pereda, Madrid) / (precedido del Tratado de la conformidad de Dios de Alfonso Rodríguez) Imprenta de Riera, Barcelona 1850 (& Librería Religiosa & Librería de Aguado, Madrid).

Física experimental e Instituciones de la natural filosofía. Traducción al castellano por D.F.G.P. Imprenta Real, Madrid 1790, 346 págs.

La preciosa alegoría moral. Traducción del portugués por don Narciso Varela de Castro. Ulloa, Madrid 1791-1792, 231 págs.

Obsequios dolorosos de la Madre de Dios, Puebla de los Angeles 1795, 32 págs.

Meditaciones sobre los atributos divinos. Madrid 1797, 4 tomos / Madrid 1923, 4 tomos.

El pastor evangélico. Traducción de Rosendo Fernández Puga. Madrid 1798-1799, 4 tomos / Traducción del portugués por D. Benito Estaun y Riol, Antonio Oliva, Gerona 1826, XXXVIII+295 págs. / Piferrer, Barcelona 1829, XXVIII+297 págs.

Muerte alegre del filósofo cristiano. Traducción por Fr. Rosendo Fernández Puga. Cano, Madrid 1799, 117 págs.

Arte de vivir contento en cualquier trabajo de la vida. Traducida y exornada con un compendio histórico, un mapa geográfico y otras notas y estampas por don Benito de Riol. Imprenta Real, Madrid 1800.

Entretenimientos del Corazón devoto con el Santísimo Corazón de Jesús, como símbolo del amor y algunos actos de desagravio o de obsequio, Madrid 1804 / Oficina Nacional, Puebla de los Angeles 1832, 273 págs. / Traducidos por Francisco Vázquez. Al fin va la novena para la fiesta del sagrado Corazón, dispuesta por el mismo autor. Tercera edición, Imprenta de Verges, Madrid 1830 (& Librería de Aguado) / Piferrer, Barcelona 1836, 318+VIII págs. / Nueva edición, adornada con dos láminas. Imprenta y librería de J. Viana Razola, Madrid 1843.

Exercicio cotidiano. Traducido por F. Vázquez, México 1818, 208 págs.

Piadoso devocionario en honor del Sagrado Corazón de Jesús, por el padre D. Teodoro de Almeida, y traducido al mejicano por el presbítero D. Pedro J. Gambino, Imprenta de Félix Mendarte, Orizaba 1839, 128 págs.

Tesoro de protección en la Santísima Virgen, o estímulos de amor y devoción a la Madre de Dios Nuestra Señora. Barcelona 1846 (& Despacho de Mellado, Madrid) / Imprenta de los herederos de la V. de Pla, Barcelona 1850 (& Librería Religiosa & Librería de Aguado, Madrid) / Librería Religiosa, Barcelona 1852, 372 págs.

Cien años de ediciones en español de Teodoro de Almeida

1783 Madrid El hombre feliz

1785-1787 Madrid Recreación filosófica

1786 Madrid El hombre feliz

1787 Madrid Cartas físico-matemáticas

1788 Madrid El hombre feliz

1788 Madrid El filósofo solitario

1788 Madrid Sermones

1788 Madrid Tesoro de paciencia

1788 Madrid Gemidos de la Madre de Dios

1790 Madrid El hombre feliz

1790 Madrid Física experimental e Instituciones de la natural filosofía

1791 Barcelona Gemidos de la Madre de Dios

1792 Madrid Recreación filosófica

1792 Madrid Cartas físico-matemáticas

1792 Madrid La preciosa alegoría moral

1793 Madrid Tesoro de paciencia

1795 Puebla de los Angeles Obsequios dolorosos de la Madre de Dios

1796 Madrid El hombre feliz

1797 Madrid Gemidos de la Madre de Dios

1797 Madrid Meditaciones sobre los atributos divinos

1798 Madrid Sermones

1798 Madrid Armonía de la razón y de la religión

1799 Madrid Muerte alegre del filósofo cristiano

1799 Madrid El pastor evangélico

1799 Madrid El hombre feliz

1800 Madrid El hombre feliz

1800 Madrid Arte de vivir contento en cualquier trabajo de la vida

1800 Madrid El hombre feliz

1802 Madrid Armonía de la razón y de la religión

1803 Madrid Recreación filosófica + Cartas

1804 Madrid Entretenimientos del Corazón devoto

1804 Madrid El hombre feliz

1806 Madrid El hombre feliz

1807 Madrid Armonía de la razón y de la religión

1818 México Exercicio cotidiano

1818 Madrid El filósofo solitario

1819 Madrid Armonía de la razón y de la religión

1820 Madrid Armonía de la razón y de la religión

1820 Madrid Armonía de la razón y de la religión

1823 Madrid Meditaciones sobre los atributos divinos

1826 Gerona El pastor evangélico

1826 Gerona Tesoro de paciencia

1827 Madrid Recreación filosófica + Cartas

1829 Barcelona El pastor evangélico

1829 Madrid El hombre feliz

1830 Madrid Entretenimientos del Corazón devoto

1832 Puebla de los Angeles Entretenimientos del Corazón devoto

1834 Zaragoza El hombre feliz

1836 Barcelona Entretenimientos del Corazón devoto

1837 Barcelona El hombre feliz

1839 Orizaba Piadoso devocionario

1840 México Armonía de la razón y de la religión

1840 París Tesoro de paciencia

1841 Barcelona Gemidos de la Madre de Dios

1842 Barcelona Armonía de la razón y de la religión

1842 Madrid El hombre feliz

1843 Madrid Entretenimientos del Corazón devoto

1843 Madrid El hombre feliz

1845 Madrid Tesoro de paciencia

1846 Barcelona Tesoro de protección en la Santísima Virgen

1846 Barcelona Tesoro de paciencia

1847 París Gemidos de la Madre de Dios

1847 Barcelona El hombre feliz

1848 Alcoy Armonía de la razón y de la religión

1848 Barcelona Armonía de la razón y de la religión

1849 París El hombre feliz

1850 Barcelona Tesoro de protección en la Santísima Virgen

1850 Barcelona Tesoro de paciencia

1850 Barcelona Armonía de la razón y de la religión

1850 Barcelona Armonía de la razón y de la religión

1852 Barcelona Tesoro de protección en la Santísima Virgen

1855 Barcelona El hombre feliz

1858 Barcelona El hombre feliz

1858 París Gemidos de la Madre de Dios

1860 Barcelona El hombre feliz

1860 Madrid El hombre feliz

1869 Barcelona El hombre feliz

1884 Barcelona El hombre feliz

Textos de Teodoro de Almeida en el proyecto Filosofía en español

1751-1800 Recreación filosófica o diálogo sobre la filosofía natural

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