Filosofía en español 
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Contradicción

Contradicción

Ver: Unidad y Lucha de los Contrarios.

Diccionario filosófico marxista · 1946:52

Contradicción

Ver Contradicciones antagónicas y no antagónicas; Lucha de contrarios; Nuevo y viejo.

Diccionario filosófico abreviado · 1959:88

Contradicción

Categoría que expresa en dialéctica la fuente interna de todo movimiento, la raíz de la vitalidad, el principio del desarrollo. Es precisamente el reconocimiento de la contradicción en las cosas y en los fenómenos del mundo objetivo lo que distingue la dialéctica de la metafísica. “...La dialéctica es el estudio de la contradicción en la esencia misma de los objetos...” (V. I. Lenin, t. XXXVIII, pág. 249). Las contradicciones dialécticas que se reflejan en el pensar, en los conceptos y en las teorías, han de distinguirse de las denominadas contradicciones “lógicas” que expresan la confusión del pensamiento y su falta de consecuencia.

Diccionario filosófico · 1965:84

Contradicción

Categoría que expresa la fuente interior de todo desarrollo o movimiento. La contradicción comprendida tan sólo como exterior no puede constituir tal fuente. El reconocimiento de la contradicción interior y de la unidad de las contradicciones interior y exterior distingue precisamente a la dialéctica de la metafísica. En otros términos, la dialéctica no se diferencia de la metafísica por el reconocimiento de la contradicción en general, sino por su reconocimiento precisamente en la esencia de los objetos, es decir, por el reconocimiento de las contradicciones esenciales, interiores, necesarias. Las contradicciones que estudia la dialéctica deben ser discriminadas de las contradicciones “lógicas”, que expresan la confusión e inconsecuencia del pensamiento. La contradicción, que se investiga por la dialéctica, siendo fuente del movimiento, se mueve y desarrolla ella misma. Entre los peldaños del desarrollo de la contradicción en la esencia misma de los objetos figuran la identidad, la diferencia y la contrariedad, la contradicción o la contradicción propiamente dicha. Por consiguiente la categoría “contradicción” caracteriza a todos los peldaños del desarrollo de la contradicción en la esencia de los objetos y el grado máximo de la misma. La identidad es ya el germen de la contradicción, pues lo viejo, siendo esencialmente idéntico a sí mismo, contiene premisas de lo nuevo, es decir, elementos que lo diferencian de sí mismo, pero subordinados a la identidad. La diferencia es también una contradicción del todo desarrollada, pues aunque a primer plano se promueve la coexistencia de lo nuevo y lo viejo, lo nuevo se ha formado y sigue desarrollándose a partir de lo viejo y en ligazón con lo viejo. En la contrariedad, las contradicciones se desarrollan aún más, pues, aunque predomina la negación, la exclusión de lo viejo por lo nuevo, en este caso lo nuevo también se forma a partir de lo viejo y se esclarece el nexo interior con lo viejo: lo nuevo se realiza como negación de lo viejo. En el peldaño superior de la contradicción, o de la contradicción propiamente dicha, lo nuevo culmina la negación, la transformación de lo viejo, incluyendo como su propio elemento lo viejo en forma metamorfoseada. En este caso se establece la conexión y la unidad interior de los diversos aspectos, cosas, &c. En el peldaño de la contradicción pasa a ser principal no la negación mutua de los aspectos de la contradicción, sino el hecho de que en este proceso ellos se originan recíprocamente como diferentes el uno del otro. Al negarse mutuamente, los aspectos contrarios se transforman el uno en el otro, son idénticos. Es la fase culminante de la contradicción. El logro de la fase superior de la contradicción por uno u otro objeto significa al mismo tiempo la maduración de las premisas de la desaparición de la contradicción, pues tal fase constituye la negación interna por objeto de sí mismo, por su automovimiento. El contenido fundamental de la dialéctica incluye la “explicación positiva de lo que existe... a la par la inteligencia de su negación, de su muerte forzosa; porque, crítica y revolucionaria por esencia, enfoca todas las formas actuales en pleno movimiento, sin omitir, por tanto, lo que tiene de perecedero y sin dejarse asustar por nada” (C. Marx, F. Engels, t. 23, p. 22). La contradicción como objeto de estudio de la dialéctica es universal y actúa en la naturaleza, la sociedad y el pensamiento, la conciencia.

Diccionario de filosofía · 1984:87