Filosofía en español 
Filosofía en español

Aquilino Duque Gimeno  1931-2021

retrato

«Licenciado en derecho por la Universidad de Sevilla, amplió estudios en las Universidades de Cambridge (Trinity Hall) y la Southern Methodist University en Dallas, Tejas. Narrador, poeta y ensayista, Aquilino Duque es autor de libros como De palabra en palabra (Premio Leopoldo Panero del Instituto de Cultura Hispánica y Fastenrath, de la Real Academia Española) o El Mono azul (finalista del premio Nadal 1973 y Premio Nacional de Literatura 1974). Es autor también de obras fundamentales como El mito de Doñana y El suicidio de la Modernidad. Desde 1981, es individuo de número de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras. Residió en Roma a principios de los 70, mientras colaboraba con la revista Destino, ciudad donde trató a Rafael Alberti. Ha impartido cursos de Literatura española contemporánea en las Universidades de Sevilla y Chapel Hill, y ha leído conferencias en las Universidades de Cambridge, Sevilla, Swarthmore, Delaware, Chicago, Roma, Pennsylvania, Georgetown, La Rábida, Málaga, Mar Menor, Oviedo, Guadalajara (Jalisco), así como en el Museo de Bellas Artes de Sevilla, el Palacio de las Naciones de Ginebra, el Instituto Británico de Sevilla, el Instituto Español de Roma, y el Instituto Cervantes en Buenos Aires, Londres, Nueva York, Viena, Munich y Utrecht.» (aquilinoduque.wordpress.com/biografia/)

«25 de marzo [1960]. Comida en casa con Pierre Emmanuel y Vicente Gaos. Emmanuel nos expone sus planes de ayuda a la oposición liberal antifranquista, en el plano cultural y económico, no político (por ahora). Ha venido a España para encauzar la ayuda que la Ford Foundation está dispuesta a dar a los jóvenes intelectuales españoles no franquistas, con becas y puestos en el extranjero. Al mismo tiempo, para preparar unos coloquios de escritores españoles y franceses, en España y en Francia, en torno a ciertos temas, literatura y sociedad por ejemplo. Le hablé de la posibilidad de ayudar a ciertos jóvenes de valía –López Pacheco, Aquilino Duque, Rafael Soto, Carlos Sahagún…– para que puedan trabajar aquí sin la angustia económica.» (José Luis Cano, Los cuadernos de Velintonia, Seix Barral, Barcelona 1986, págs. 134-135.)

Conversación con Aquilino Duque

Teatro Crítico 31 ⋅ 20 de junio de 2020

2021 «Conocí a Aquilino Duque el 4 de abril de 2019, tras la presentación que de mi libro, La conquista de México, organizó Francisco José Contreras en la Facultad de Derecho de Sevilla. Una fugaz conversación en las escaleras fue todo lo que dio de sí ese primer contacto. Un año después, el 20 de junio de 2020, tuve la oportunidad de conversar durante una hora, pantallas mediante, en una entrega de Teatro Crítico. Para entonces, quien hasta el momento era para mí un polígrafo de indudable sevillanía, había adquirido un enorme interés, pues su biografía se cruzó con algunos de los protagonistas de Nuestro hombre en la CIA. Guerra fria, antifranquismo: Guerra Fría, antifranquismo y federalismo, libro que el propio Aquilino Duque reseñó, ofreciendo datos para mí desconocidos.
Con la lupa puesta sobre Duque, el regreso a las fuentes manejadas para escribir el libro sirvió para que su nombre emergiera de obras como Los cuadernos de Velintonia, imprescindible referencia para todo aquel que pretenda ahondar en las conexiones entre la oposición no comunista al franquismo y el proyecto de una Europa federal y antisoviética impulsado desde Washington. Tal y como dejó escrito José Luis Cano ya en los tiempos del felipismo triunfante, fue él mismo el que, en el curos de una comida a la que asistieron Pierre Emmanuel y Vicente Gaos, celebrada el 25 de marzo de 1960, dio el nombre de Aquilino Duque, al cabo colaborador de la revista Ínsula que él mismo dirigía, al emisario de la Fundación Ford, entidad que estaba dispuesta a entregar becas y bolsas de viaje a jóvenes no franquistas. Junto a Duque, Cano pronunció los nombres de Jesús López Pacheco, Rafael Soto y Carlos Sahagún, personalidades a las que había que ayudar para que pudieran “trabajar aquí sin la angustia económica”. Duque había conocido a Pierre Emmanuel recientemente, durante la cena celebrada el 20 de octubre de 1959 en el madrileño restaurante Zarauz, a la que asistieron, entre otros: Vicente Aleixandre, Gerardo Diego, Pedro Laín, Julián Marías, Aranguren, Torrente Ballester, su admirado Dionisio Ridruejo, Fernando Baeza, Luis Rosales y Leopoldo Panero -a los que frecuentaba en el bar del Instituto de Cultura Hispánica-, Rodrigo Uría, José Ortega Spottorno, Paulino Garagorri, Luis Felipe Vivanco, José Antonio Maravall, Luis Díez del Corral, Ignacio Aldecoa, Jaime Ferrán y Antonio Buero Vallejo.
En arranque de la década de los 60, Aquilino Duque, becado en Cambridge, con un máster cursado en Dallas, se había recuperado del fugaz entusiasmo con el que acogió la revolución castrista, ilusión que quedó definitivamente atrás el integrarse en las estructuras de la ONU en Ginebra. Fue a finales de esos años cuando Duque, que había comprobado con sus propios ojos la realidad soviética, se distanció definitivamente de los movimientos que condujeron a mayo del 68. Las consecuencias son bien conocidas. Aunque obtuvo algunos reconocimientos, Duque sufrió en sus carnes los rigores del sectarismo hispánico. En cuanto a su relación con la política activa, Aquilino Duque estuvo en embrión de Alianza Popular antes de que cuajara como partido político, sin que los cantos de sirena del Jorge Verstrynge de entonces lograran atraerlo a la órbita de Manuel Fraga.
De Aquilino Duque conservo algunos documentos de su archivo que me hizo llegar amablemente. El paralizante tiempo coronavírico impidió que celebráramos una reunión que quedará para siempre pendiente. Sirvan estas líneas como agradecimiento al amable trato que siempre me dio.» (Iván Vélez, “Aquilino Duque (1931-2021)”, Libertad Digital, 19 septiembre 2021.)

Sobre Aquilino Duque & José Ignacio Gracia Noriega

1998 Aquilino Duque, prólogo a José Ignacio Gracia Noriega, En un jardín tenebroso, Pretextos, Madrid 1998.

2003 José Ignacio Gracia Noriega, “Las dos caras de don Juan” (LNE, 24 de agosto de 2003.)

2016 Aquilino Duque, “Corpore insepulto” (7 septiembre 2016).

Documentos sobre Aquilino Duque en Filosofía en español

1974 Carta de Aquilino Duque a Pablo Martí Zaro (Roma, 17 de noviembre de 1974.)

1975 Carta de Aquilino Duque a Baltasar Porcel (Roma, 3 de junio de 1975.)

1977 Carta de Pablo Martí Zaro a Aquilino Duque (Madrid, 28 de enero de 1977.)

1981 Carta de Vicente Enrique Tarancón a Aquilino Duque (Madrid, 28 de enero de 1977.)

1981 Carta de Aquilino Duque a Vicente Enrique Tarancón (Bormujos, 24 de abril de 1981.)

ivc