El Siglo Futuro, diario católico
Madrid, 3 de marzo de 1908
 
año 2, número 186
página 3

 
Asociación de la Buena Prensa
 

Muy señor nuestro: Los seminaristas de esta archidiócesis tenemos el gusto de participarle que, siguiendo el ejemplo de otros muchos Seminarios de España, hemos constituido una Sociedad cuyo fin será propagar en época de vacaciones la buena prensa y perseguir a la liberal y sectaria.

Para este objeto el Superior ha tenido a bien conceder un local que hemos habilitado para salón de lectura (el cual tendremos sumo gusto que visiten los señores sacerdotes cuando vengan al próximo concurso), donde nos ilustraremos para ejercer el apostolado de la buena prensa; apostolado que será como el complemento de la catequesis, porque así se evitará que el periódico impío arranque del corazón del hombre las ideas cristianas y salvadoras que aprendió de niño por boca de su Pastor.

Al que conozca un poco el modo de ser de la sociedad actual, no puede ocultársele la influencia pasmosa que ejerce la prensa en el orden político y social.

Mas, ¡triste es confesarlo!, la prensa de España y de toda Europa; el cuarto poder, como se le llama; la palanca que, cual la pedida por Arquímedes, mueve el mundo moderno, se encuentra en poder de los enemigos de la Iglesia y del orden social.

Esa arma terrible es la que utilizan la masonería y el liberalismo de todos los matices para perseguir y destruir, si posible fuera, la Iglesia católica.

¡El periódico impío y sectario, he ahí al mayor enemigo actual del catolicismo!

Felizmente los católicos españoles, viendo el triste ejemplo de la desventurada Francia, han iniciado un movimiento salvador que hará quebrantar la influencia de la prensa sectaria.

Fruto glorioso de ese movimiento es el Congreso de la Buena Prensa, celebrado en Sevilla, y que en Septiembre próximo se repetirá con no menos entusiasmo en Zaragoza.

Los seminaristas españoles no podían cruzarse de brazos ante tan consolador movimiento y procuran ganar la vanguardia, luchando con decisión y energía.

Nosotros, pues, los seminaristas compostelanos, con la protección de nuestros superiores y con el beneplácito de nuestro queridísimo Pastor, que se ha dignado bendecir nuestra obra, entramos gustosos en esta valiente Cruzada y tenemos esperanza de que ya en las próximas vacaciones se dejarán sentir los benéficos frutos de nuestros entusiasmos.

No dudamos de que usted nos ayudará en nuestra empresa, poniendo toda su influencia para que los feligreses pudientes se suscriban a la prensa católica, y así todos unidos, nosotros con el entusiasmo de corazones jóvenes y los señores sacerdotes aconsejándonos con su experiencia, lograremos en pocos años desterrar de la diócesis todo periódico enemigo de Dios y de su Iglesia.

La obra de la buena prensa se impone.

A trabajar, pues, todos en esta obra de inmenso interés para la causa de la religión y de la patria.

Suyos afectísimos y seguros servidores que besan su mano,

Consiliarios: Sr. D. José Couselo Bouzas y Sr. D. Jacinto Piñeiro Soto.– Presidente, José Sánchez Mosquera.– Vicepresidente, Francisco Canosa Nemiña.– Secretario, Carlos Quirós Rodríguez.– Bibliotecario, Clemente Moreira Oreiro.– Vocales: Santiago Abuelo Alvite, tesorero, y José Martínez Balirach, secretario 2.°

Seminario de Santiago, 1 Febrero 1908.

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